Adonis – Mitología griega –

Hijo de una relación incestuosa e intrigante, la leyenda de Adonis viene de Siria.

La reina tenía una hija llamada Mirra, que era tan hermosa que la proclamaron más hermosa que la diosa de la belleza misma. Decidida a vengarse, Afrodita hizo que Mirra se enamorara de su propio padre y, tramando una cita, entra a la habitación del padre sin ser vista y tiene relaciones con él. Enojado, al descubrir la traición de su hija, el rey planea condenarla a muerte, pero antes de eso, Mirra huye y se pierde en el mundo.

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En compasión por la joven, los dioses deciden transformarla en un árbol, cuyas gotas son las lágrimas de la propia Mirra, pero lo que no se sabía es que la joven había quedado embarazada de su padre. Nueve meses después, el árbol de Mirra se abrió y de él salió un niño de extraordinaria belleza, que fue criado por las ninfas y llamado Adonis.

Cuando era joven, Adonis llama la atención de Afrodita y ella se enamora perdidamente de él (muchos dicen que es la venganza de Mirra). Los dos se atraen y permanecen juntos, volviéndose inseparables, despertando la ira de Ares, quien estaba enamorado de Afrodita.

Un día, al salir al bosque a cazar, Adonis encuentra un gran jabalí, colocado a propósito por Ares. Adonis comienza una gran pelea contra el animal y lo golpea con su arco. Herido, el animal ruge de dolor y hace girar el cuerpo, golpea al joven y le da un golpe mortal.

Afrodita, desde lejos, escucha los gritos de la amada, pero cuando llega ya es demasiado tarde. La sangre de Adonis tiñe las rosas blancas que allí se convierten en rosas rojas. Afrodita lo enterró allí mismo, después de llorar todas las lágrimas de dolor, porque no podía soportar estar lejos de su amada.

Al llegar al Hades, Adonis aún era un joven muy hermoso y así despierta el amor en Perséfone, reina del inframundo. Afrodita, muy irritada por esa situación, acude a Zeus y le pide ayuda, y así el dios de los dioses hace que Adonis pase un tercio del año en el Hades, con Perséfone, y el tercio restante lo elegiría donde gastar, y optó por pasar con Afrodita.

Así, aparece el símbolo de la vegetación que muere en invierno (descendiendo al inframundo, quedando con Perséfone) y regresando a la Tierra en primavera (para quedarse con Afrodita).

El mito de Adonis se ha extendido y ha sido adorado por todo el este, Grecia y las islas del Mediterráneo.

Adonis es un dios que reúne elementos de diversos orígenes, mostrando cómo la religiosidad griega se extendió por la humanidad.

En psicología, Adonis se utilizó para nombrar un complejo, donde el deseo de los jóvenes y adultos varones de mantener un cuerpo perfecto se convierte en una obsesión.

Fuente:
Hacquard, Georges, Diccionario de mitología griega y romana.
ASFranchini, Carmen Seganfredo, Las 100 mejores historias de la mitología, Editora L&MP. ISBN 85-254-1316-x

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