Written by Al mirar el relevo de antorcha Olimpica, uno no puede imaginar el significado real de su tradición. Llevada por invitados y deportistas de diferentes deportes, la antorcha recorre un largo camino para llegar a su destino, el país elegido para albergar los juegos.
Para hablar de la llama, tenemos que remontarnos unos milenios. Alrededor del siglo VIII a. C., los griegos creían que el fuego era algo divino, mantenían una llama encendida en reverencia por la esposa de Zeus, Hera. Con eso, en 1928, en los Juegos de Amsterdam, esta costumbre fue rescatada a la Era Moderna y convertida en un homenaje a la Antigua Grecia, una pira permaneció encendida durante todo el evento.
El primer relevo de la antorcha olímpica tuvo lugar en 1936, en Berlín, con 3.000 participantes. Sin embargo, su apreciación llegó recién en 1948, en la edición de los Juegos de Londres. Encendida en Atenas, la antorcha pasó de mano en mano hasta que encendió un fuego en homenaje a la mitología griega.
La idea del relevo surgió en referencia al mensajero que recorrió todas las ciudades-estado de la Antigua Grecia, para anunciar el inicio de los juegos y establecer una tregua, durante la competencia, a partir de los conflictos existentes. Cualquier batalla en curso se detuvo un mes antes de los juegos hasta su final. Por eso la llama olímpica representa la paz entre los pueblos.
Sin romper las tradiciones griegas, mujeres vestidas con ropas y complementos similares a las sacerdotisas lideran el espectáculo, con la ayuda de los rayos del sol y un espejo de forma cóncava, antes conocido como skaphia, la llama se enciende frente al templo de Hera. Realizado aproximadamente 90 días antes de las competiciones, este ritual se inició en 1952, en Helsinki, y se perpetúa de la misma forma, tanto en los Juegos Olímpicos de Verano como en los Juegos de Invierno.
Volviendo ahora al siglo XXI, donde espectadores de todo el mundo siguen este acontecimiento milenario, la antorcha se enciende en Olimpia, transportada por diferentes ciudades hasta llegar a Atenas. Luego, parte hacia su país anfitrión, recorre los principales atractivos turísticos y completa el inicio de las Olimpiadas luego de encender la gran pira en la ceremonia de apertura.
Una gran responsabilidad para los 12 mil conductores de la edición Rio 2016. Cada participante porta la antorcha olímpica durante 200 metros, sin que se apague la llama, y despierta a los aficionados para el inicio de los juegos. Hay más de 12 mil kilómetros en 300 ciudades de Brasil.
Referencias bibliográficas:
https://www.rio2016.com/noticias/tocha-olimpica-da-grecia-antiga-ao-rio-2016
http://www1.folha.uol.com.br/fol/olimpiadas/tocha.htm
https://www.rio2016.com/tocha-sobre#
