Bronquiolos – Sistema respiratorio

bronquiolos son estructuras que componen el sistema respiratorio de humanos y animales superiores, y consisten en ramas de los bronquios intrapulmonares que penetran los alvéolos pulmonares.

La primera generación de bronquiolos, llamados bronquiolos primarios, origina las vías respiratorias de un lóbulo pulmonar. A medida que disminuye la altura del epitelio respiratorio, las células son más cuboidales, especialmente en los bronquiolos más pequeños, pero aún muy ciliadas. Las células caliciformes son más escasas y las células basales no están presentes, por lo que el epitelio se convierte en un tipo cuboidal simple o columnar. Las células exocrinas bronquiolares, también llamadas células de Clara, se encuentran con menos frecuencia en el epitelio de estas vías respiratorias. Estas células, a su vez, son capaces de secretar y absorber sustancias glicoproteicas que recubren y protegen el epitelio bronquiolar, además de tener la capacidad de degradar determinadas sustancias tóxicas que se inhalan. Además, estas células exhiben competencia de células madre, dividiendo y reconstruyendo el epitelio bronquiolar según sea necesario.

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La lámina propia de los bronquiolos es un tejido conectivo laxo libre de glándulas, seguido del músculo liso. La capa adventicia no tiene cartílago, pero tiene una extensa red de fibras elásticas. Mientras se inhala el aire y se distiende el pulmón, las fibras elásticas y los músculos lisos son capaces de ejercer una fuerza opuesta distribuida uniformemente por los bronquiolos, manteniendo así la integridad de esta estructura.

Los bronquiolos se ramifican en varios bronquiolos terminales más pequeños, que constituyen la última porción conductora del sistema respiratorio. En estos bronquiolos, el epitelio es de tipo cúbico simple y las células de Clara suelen ser numerosas.

Cada bronquiolo terminal sufre una subdivisión final para dar lugar a bronquiolos respiratorios. Estructuralmente, estos pueden considerarse la continuación de un bronquiolo terminal, que a veces se interrumpe por sacaciones de pared delgada, conocidas como alvéolos. Debido a que los bronquiolos presentan alvéolos a lo largo de su eje longitudinal, el epitelio, la lámina propia y la submucosa cambian marcadamente en los lugares donde se encuentran los alvéolos, transformando el epitelio cúbico simple en un pavimento simple, con la submucosa y la musculatura suaves rodeando cada sacación.

Fuentes:
Tratado de Histología Veterinaria – Samuelson, Don A., 2007.
Histología básica – Luiz C. Junqueira y José Carneiro. Editora Guanabara Koogan SA (10a Ed.), 2004.

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