Declaración de Johannesburgo – Ecología

Coordinada por las Naciones Unidas (ONU), en 2002, la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sostenible se llevó a cabo en Johannesburgo, Sudáfrica, también conocida como Río + 10, ya que marcó el décimo aniversario de la última gran conferencia ambiental de la ONU, la Cumbre de la Tierra o Río-92.

Uno de los principales objetivos de la conferencia fue poner en práctica los compromisos de las partes con acuerdos ya firmados anteriormente, especialmente en lo que respecta a la Agenda 21, documento firmado en Río-92 que básicamente consistía en una agenda de trabajo para el nuevo siglo que se acercaba. , con el objetivo de proteger nuestro planeta y su desarrollo sostenible.

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A la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible asistieron 22.000 participantes de 193 países y resultó en dos documentos: una declaración política y un plan de implementación.

Declaración de Johannesburgo

La declaración de política, titulada “El Compromiso de Johannesburgo sobre el Desarrollo Sostenible”, se divide en 6 temas: (1) Desde los orígenes hasta el futuro; (2) De Estocolmo a Río de Janeiro a Johannesburgo; (3) Los desafíos que enfrentamos; (4) Nuestro compromiso con el desarrollo sostenible; (5) El multilateralismo es el futuro y (6) Hacerlo realidad. En el documento, las partes reafirmaron su compromiso con el desarrollo sostenible y sus tres pilares: desarrollo económico, social y ambiental. También reforzaron su compromiso con la implementación de la Agenda 21, los Objetivos de Desarrollo del Milenio (establecidos por la ONU en 2000) y el Plan de Implementación de Johannesburgo. Además, se destacaron los desafíos enfrentados, como la globalización, los impactos ambientales y la mala distribución del ingreso -tanto dentro como entre países-, reconociendo que la erradicación de la pobreza y el cambio en los patrones de consumo, entre otros factores, son fundamentales para el desarrollo sostenible.

Plan de IMPLEMENTACION

El plan de implementación consiste en un documento extenso que estableció metas para orientar la implementación de los compromisos asumidos por los países. Algunos de los compromisos asumidos en este plan fueron crear un fondo de solidaridad mundial para erradicar la pobreza y promover el desarrollo social y humano en los países en desarrollo; reducir el número de personas que ganan menos de 1 dólar al día y también el número de personas que no tienen acceso a agua potable; desarrollar y difundir formas alternativas de generación de energía; reducir la generación de residuos; reducir la contaminación; estabilizar la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera; promover el acceso de los países en desarrollo a sustancias que no dañen la capa de ozono; fomentar la agricultura y el desarrollo rural sostenibles; asegurar la conservación de los ecosistemas marinos y la biodiversidad; incrementar el acceso al saneamiento para mejorar la salud de la población; reducir las tasas de mortalidad materna e infantil; asegurar el acceso igualitario de las mujeres a los servicios de salud; asegurar una alimentación suficiente y nutricionalmente adecuada para todos, entre muchos otros.

A diferencia de Río-92 -que sirvió para consensuar el tema ambiental, resultando en la elaboración de la Agenda 21-, Río + 10 fue mucho más modesto y básicamente consistió en tratar de llegar a medidas para su implementación. Pero, lamentablemente, la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible generó frustración entre muchos que estaban preocupados por el futuro del planeta, ya que no logró producir tantos avances como se esperaba. Además, en el plan de implementación, para muchas de las metas no existía estipulación de plazos, ni sistema de seguimiento o sanciones, lo que tornaba subjetivo su cumplimiento.

Veinte años después de Río-92, en 2012, la agenda de desarrollo sostenible para las próximas décadas se volvió a debatir en Río de Janeiro, cuando se llevó a cabo la Río + 20, que volvió a poner de relieve la pobreza como uno de los mayores desafíos a afrontar.

Referencias:

Acuerdos Globales. Gobierno de Brasil. 2012.

Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo. 1992.

Declaración de Johannesburgo sobre el Desarrollo Sostenible. Naciones Unidas. 2002.

Juras, I. Rio + 10 – El plan de acción de Johannesburgo. Reporte especial. 2002.

Plan de Implementación de la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sostenible. 2002.

Sequinel, M. Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sostenible – Johannesburgo: entre el sueño y lo posible. Análisis coyuntural. 2002.

UNESCO y Desarrollo Sostenible, UNESCO. 2005.

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