Técnica de diálisis que utiliza como membrana de intercambio y filtración una envoltura interna del cuerpo, el peritoneo.
La diálisis peritoneal se utilizó por primera vez para el tratamiento de la insuficiencia renal aguda, pero este uso ya no se utiliza en la actualidad, excepto en niños. Por otro lado, se aplica, debido a la buena resistencia del peritoneo, al tratamiento de la insuficiencia renal crónica.
El peritoneo (una membrana de doble capa que recubre la cavidad abdominal y los órganos que contiene, uno de cuyos lados está atravesado por numerosos capilares sanguíneos) se utiliza como sistema de filtrado natural durante esta técnica de purificación extrarrenal. Los intercambios de agua y sustancias disueltas (sodio, potasio, calcio) tienen lugar entonces entre la sangre contenida en los capilares peritoneales y el dializado. Esta se prepara de antemano en una bolsa de plástico, se calienta y luego se introduce en la cavidad peritoneal a través de un catéter de silicona implantado quirúrgicamente en el abdomen. Los intercambios tienen lugar mientras el líquido se mantenga en la cavidad peritoneal. Se evacua (vaciando) inclinando la bolsa de diálisis. La introducción del dializado en la cavidad peritoneal y su vaciado se facilitan mediante el uso de máquinas automáticas. Una vez drenado, el dializado se desecha y se reemplaza con dializado nuevo.
Diferentes tipos de diálisis peritoneal.
Diálisis peritoneal ambulatoria continua se utiliza en el tratamiento de la enfermedad renal crónica. Cuatro veces al día, siete días a la semana, el dializado se introduce en la cavidad peritoneal a través de un catéter; luego permanece en su lugar durante 4 horas antes de ser evacuado. Esta técnica, que se ha desarrollado desde principios de la década de 1980, se puede realizar en casa. Es necesario un curso de formación de unos días, realizado en un centro especializado, al final del cual el paciente puede realizar su diálisis de forma autónoma. Pueden ocurrir infecciones peritoneales (peritonitis), generalmente debido a las maniobras de conectar las bolsas al catéter; Suelen combatirse fácilmente con tratamiento antibiótico, pero en algunos casos es necesario cambiar el catéter. Entre las demás complicaciones, la más grave es la alteración progresiva de la permeabilidad de la membrana peritoneal, lo que obliga a abandonar la diálisis peritoneal continua ambulatoria por hemodiálisis. Durante períodos de tiempo relativamente cortos, hasta 5 años, esta técnica parece dar resultados tan buenos como la hemodiálisis en el tratamiento de la insuficiencia renal crónica. Sin embargo, hay una falta de retrospectiva para evaluar su eficacia durante períodos más largos.
Diálisis peritoneal automatizada se basa en los mismos principios que el anterior. Utiliza un dispositivo llamado ciclador que, preprogramado, realiza automáticamente varios ciclos de intercambio sucesivos (llenado de la cavidad peritoneal y vaciado). Este método está destinado al tratamiento en el hogar después de una breve fase de entrenamiento y se utiliza principalmente por la noche, mientras el paciente duerme. Tiene la gran ventaja de permitir una total autonomía durante el día.
Ver : hemodiálisis.