El propio tejido conectivo – Histología
El principal constituyente de este tipo de tejido es la matriz extracelular rica en colágeno, fibras reticulares, fibras elásticas, glicoproteínas e integrinas. Esta gran diversidad de moléculas presentes en la matriz extracelular juega un papel importante en la reserva de varios factores que controlan la proliferación y diferenciación celular. Además de la abundante matriz extracelular, el propio tejido conectivo tiene una población muy heterogénea de células como fibroblastos, fibrocitos, macrófagos, mastocitos, linfocitos, células plasmáticas, adipocitos y células mesenquimales indiferenciadas. Debido a su función de integración funcional, intercambio de gases y suministro de nutrientes, este tejido está ricamente vascularizado e inervado.
El tejido conectivo en sí se puede dividir en tejido conectivo laxo y tejido conectivo denso:
- El tejido conectivo suelto sostiene estructuras sujetas a baja presión y fricción, generalmente llena los espacios entre las células musculares y sostiene el tejido epitelial, también se encuentra en las papilas dérmicas, hipodermis, membranas serosas que recubren las cavidades peritoneal y pleural y en las glándulas.
- El tejido conectivo denso proporciona resistencia y protección al tejido, es menos flexible que el tejido conectivo laxo y más resistente al estrés.
Bibliografía:
Histología básica I LCJunqueira y José Carneiro. – [12 . ed]. – Río de Janeiro: Guanabara Koogan, 2013.
Abraham L. Kierszenbaum. Histología y biología celular, una introducción a la patología. 3ª edición. Elsevier, 2012