Elefantiasis o filariasis: transmisión, síntomas, tratamiento y prevención

LA filariasis, filariasis o elefantiasis es una enfermedad parasitaria endémica de las regiones tropicales y subtropicales del planeta, llegando a las regiones más pobres. En estas regiones, es un problema de salud pública, con un estimado de 120 millones de portadores. El vector es un mosquito del género Culex y el hombre es el único reservorio. Hay tres agentes etiológicos: Wuchereria bancrofti, Brugia nalayi y B. timori. En las Américas, la enfermedad es causada solo por Wuchereria bancrofti, nematodo que vive en los vasos linfáticos de los individuos infectados. También se conoce como filariasis de Bancrofti o elefantiasis, debido a una de las manifestaciones en la fase crónica, que provoca un agrandamiento excesivo del órgano afectado, similar a la pata de un elefante. El parásito tiene cuatro formas diferentes: gusano macho adulto, gusano hembra adulto, microfilarias (que circulan en la sangre periférica en humanos) y larvas (que se encuentran en el insecto vector). Es una parasitosis que no se transmite de persona a persona.

Transmisión

Por la picadura de los mosquitos transmisores con larvas infecciosas. En Brasil, el Culex quinquefasciatus y el transmisor principal. En general, las microfilarias tienen periodicidad para circular en la sangre periférica, siendo más detectadas por la noche, entre las 11 pm y la 1 am. No es una enfermedad que se transmite de persona a persona. El ciclo biológico es así: un insecto transmisor pica a un hombre infectado con microfilaremia y lo transmite a otro individuo, después de que las microfilarias han madurado en el vector, lo que ocurre entre 12 a 14 días de ingesta de sangre. La microfilaremia puede durar de 5 a 10 años.

¿Eres estudiante, profesor o academia?

DATE DE ALTA EN NUESTRA RED SOCIAL!, Grupos de estudio, apuntes, escribe en tu propio blog, añadir tu academia o dar clases particulares y Aprende!!!.

Abrir un perfil

Síntomas

Puede haber individuos asintomáticos. Los casos sintomáticos presentan los siguientes síntomas: fiebre aguda recurrente, astenia, dolores musculares, fotofobia, urticaria, pericarditis, cefalea, infección de los ganglios linfáticos. En casos más graves, las personas tienen hidrocele (acumulación de agua en los testículos), kiluria (aparición de grasa en la orina), agrandamiento exagerado de las extremidades (de ahí el nombre de elefantiasis), mamas, genitales y asma.

Diagnóstico

Como rutina de diagnóstico, búsqueda de microfilarias en sangre circulante (método de gota gruesa). En casos específicos, se pueden realizar investigaciones sobre líquido ascítico (líquido en el abdomen), líquido pleural, sinovial, cerebroespinal (LCR o LCR), orina, ganglios. Fuera de la rutina, puede ser una investigación del tórax del gusano adulto en el sistema linfático, los genitales u otras lesiones. Para buscar antígenos circulantes se pueden realizar ELISA o pruebas inmunocromatográficas. En hombres, puede estar indicada la ecografía del escroto y en las mujeres, la ecografía de la mama o de la región inguinal y axilar.

Tratamiento

Los fármacos más utilizados son: Dietilcarbamazina (DEC) e Ivermectina (IVM), o una asociación de ambos.

Prevención

Una de las medidas de control adoptadas es la reducción del mosquito vector, mediante biocidas, instalación de mosquiteros o cortinas impregnadas de insecticidas para limitar el contacto entre el vector y el hombre; uso de insecticidas dentro de los hogares; informar a las comunidades de las zonas afectadas sobre la enfermedad y las medidas que se pueden tomar para reducirla / eliminarla; identificación de posibles criaderos; y tratamiento masivo para poblaciones humanas que residen en brotes.

Bibliografía:

Filariasis. Disponible en http://www.fiocruz.br/bibmang/cgi/cgilua.exe/sys/start.htm?infoid=94&sid=106

FUNDACIÓN NACIONAL DE SALUD. Centro Nacional de Epidemiología. Enfermedades infecciosas y parasitarias: guía de bolsillo. Brasilia, 1999. 217 p.

AVISO LEGAL: La información proporcionada en esta página solo debe usarse con fines informativos y nunca debe usarse para reemplazar un diagnóstico médico realizado por un profesional calificado. Los autores de este sitio web están exentos de cualquier responsabilidad legal que se derive del mal uso de la información aquí publicada.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *