Emiliano Zapata: Conoce la historia del líder de la Revolución Mexicana

Emiliano Zapata (1879-1919) fue un líder revolucionario mexicano y hasta el día de hoy es considerado un héroe para muchos en este país.

Zapata dirigió la Revolución Mexicana (1910) desde el sur de México, al mando del Ejército Libertador del Sur contra los terratenientes que monopolizaron los recursos de tierra y agua para producir caña de azúcar.

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Llevó a cabo la reforma agraria, devolviendo a los campesinos a sus tierras, en un movimiento conocido como “zapatismo”.

Biografía de Emiliano Zapata

Emiliano Zapata
Emiliano Zapata
Emiliano Zapata Salazar nació en el caserío rural de San Miguel Anenecuilco (en el estado de Morelos), el 8 de agosto de 1879. Fue el penúltimo de diez hijos de Gabriel Zapata y Cleopas Jertrudiz Salazar.

Esta tierra de propiedad familiar, sin embargo, no era fértil. Humilde, los niños solo recibieron educación primaria, lo cual fue un privilegio, ya que el 80% de la población mexicana era analfabeta.

Aun así, Zapata fue alumno de Emilio Vara, quien a su vez lo introdujo en el anarquismo de Ricardo Flores Magón (1874-1922), marcando profundamente su formación.

Nacido bajo el gobierno de Porfirio Díaz (1830-1915), dictador en México durante treinta años, Zapata creció en un momento en que el país estaba desarrollando sus primeras industrias.

Sin embargo, Díaz sería responsable de la degradación de los trabajadores rurales, permitiendo que los grandes agricultores se apropien de las tierras de las comunidades indígenas independientes (pueblos). Esto aumentó la miseria de los agricultores y la concentración de la tierra en unas pocas familias.

El propio padre de Emiliano Zapata se apropió de parte de su tierra por uno de estos terratenientes.

En 1909, a la edad de treinta años, Zapata fue elegido “Presidente de la Junta de Defensa de las Tierras de Anenecuilco”. De esta manera se convirtió en el líder militar de las fuerzas campesinas de la región.

Así, Zapata inició la campaña por los derechos de los campesinos privados de su tierra, que llevó a la cárcel en varias ocasiones.

En una de las ocasiones en que fue puesto en libertad, abandonó las reclamaciones pacíficas de los títulos de propiedad de los agricultores.

Tomó la decisión de formar un ejército y comenzar la lucha armada en el sur de México, cuando se convirtió en el general del “Ejército Libertador del Sur”.

Emiliano Zapata y la Revolución Mexicana

Emiliano Zapata y Pancho Villa
Pancho Villa, centro y Emiliano Zapata, derecha, líderes de los ejércitos norte y sur, respectivamente
En 1910, Zapata se alía con Francisco I. Madero (1873-1913), un político que se opuso a Porfirio Díaz en las elecciones de ese año. Sin embargo, el dictador es reelegido luego de una serie de crímenes electorales, desencadenando la Revolución Mexicana de 1910.

Aliado con el ejército de Pancho Villa (1878-1923), líder de los ejércitos revolucionarios del norte, Zapata dirigió a más de cinco mil hombres. Bajo su liderazgo, capturan las ciudades de Cuautla y Cuernavaca, ayudando a Madero a asumir la presidencia.

En consecuencia, Madero resulta ser un farsante y no cumple su promesa de devolver la tierra a los campesinos.

Zapata, a su vez, mantiene sus ideales revolucionarios y lanza el “Plan Ayala” en 1911, proponiendo “Reforma, Libertad, Justicia y Derecho”. Por lo tanto, implementa una reforma agraria sustancial en el estado de Morelos, en el sur de México.

Mientras tanto, el presidente Madero y su adjunto son asesinados por el general Victoriano Huerta (1850-1916), quien asume el poder en 1913.

Sin embargo, los ejércitos revolucionarios del norte y del sur están unidos y apoyados por las tropas leales de Venustiano Carranza (1859-1920). Juntos derrotan a las fuerzas de Huerta en julio de 1914.

Carranza se declara nuevo líder revolucionario y convoca diputados para redactar una constitución. Al rescate acudieron representantes de todos los estados y facciones políticas, excepto zapatistas y villistas.

El texto se promulga en 1917, pero Zapata no aceptó el nuevo liderazgo y permanece en armas contra el nuevo régimen.

Finalmente, Emiliano Zapata es asesinado a los 39 años, en una emboscada montada por el entonces coronel Jesús Guajardo (1892-1920) el 9 de abril de 1919 en la ciudad de Chinameca.

Después de su muerte, el Ejército de Liberación del Sur comenzó a desintegrarse y el movimiento zapatista perdió su fuerza.

Zapatismo

Incluso con la muerte de Emiliano Zapata, sus ideas se mantuvieron vivas e inspiraron a varios grupos políticos de izquierda mexicanos.

El más famoso de ellos fue el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). Esta fue una organización militar formada por indígenas y campesinos, originaria del sur de México, en el estado de Chiapas.

Este movimiento se hizo famoso en todo el mundo el 1 de enero de 1994 cuando ocupó varias ciudades mexicanas. También exigieron al gobierno respeto a los pueblos indígenas, extinción del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá, y el fin de la corrupción.

Asimismo, una de las banderas del EZLN era la reforma agraria, el mismo ideal por el que había luchado Emiliano Zapata y que inspiró a estas guerrillas.

Frases de Emiliano Zapata

  • «Es mejor morir de pie que vivir de rodillas».
  • «Un pueblo fuerte no necesita un líder fuerte».
  • «Si no hay justicia para el pueblo, no haya paz para el gobierno».
  • «Quiero morir como esclavo de los principios, no de los hombres».
  • «La tierra es para quien la trabaja».
  • «Yo perdono al que roba y al que mata, pero al que traiciona, nunca».

Curiosidades sobre Emiliano Zapata

  • Emiliano Zapata tenía fama de vanidoso y siempre bien vestido.
  • El líder de la Revolución Mexicana sería inmortalizado en varios lienzos del pintor Diego Rivera.
  • Zapata era un mestizo de ascendencia nahua y española.
  • Se dice que Zapata tomó la decisión de luchar por los derechos de los campesinos cuando vio llorar a su padre al ser despojado de parte de su tierra.

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