son llamados espeleotemas las formaciones rocosas existentes en el interior de una cueva, resultantes de la sedimentación y cristalización de minerales disueltos en el agua. El término tiene su origen en el idioma griego, combinando «spileo» = cueva y «thema» depósito, acumulación.
Su aparición es más común en las llamadas rocas carbonatadas (compuestas por rocas calizas, mármoles y dolomíticas).
Hay varios espeleotemas, pero se pueden mencionar los más comunes en el interior de las cuevas:
- estalactitas;
- estalagmitas;
- columnas;
- cortinas y banderas;
- coliflor;
- excéntricos
- flores
- cascadas
- presas de travertino;
Incluso dentro de estas formaciones existen subgrupos, varias diferencias en sus diversos aspectos, recordando que existen otras formaciones aún presentes en el estudio de la espeleología.
Hay muchas formas y criterios para la clasificación de los espeleotemas, y no hay ninguno que sea universalmente aceptado. La más aceptada tiene la agrupación de espeleotemas en cinco divisiones, en función de la forma de precipitación de los minerales:
- Depósito de agua circulante – espeleotemas formados por la deposición de minerales contenidos en soluciones acuosas que se mueven en las cuevas, principalmente por la fuerza de la gravedad y que se desarrollan a través de tres mecanismos: goteo, correr y arremolinarse. Ocurre tanto en los techos como en las paredes y pisos de las cuevas y son las formas más frecuentes que se encuentran en las cuevas de todo el mundo. Sus principales ejemplos: estalactitas, cortinas, estalagmitas, columnas, cálices, torres de calcita, escorrentías de calcita, tubos, travertinos.
- Depósito de agua de exudación: se forma en cuevas a partir de soluciones acuosas que, por acción capilar, circulan lenta y discontinuamente a través de los poros de la roca o por los vacíos intercristalinos de espeleotemas previamente existentes. Sus principales ejemplos son: helictitas, heligmitas, agujas, flores, algodón, cabello de ángel, coralloides, pinos, hojas, escudos o discos, esferas o ampollas, hisopos de algodón.
- Depósitos de agua estancada: son espeleotemas formados a partir de la deposición de minerales en las paredes sumergidas o superficiales de las presas de agua existentes en las cuevas en las que el agua puede saturarse de carbonato debido a la lenta liberación de CO2 al medio ambiente. Sus principales ejemplos son: geodos (dientes de perro, triángulos, pirámides, estrellas), balsas, burbujas de calcita, plataformas, mazas, picos, candelabros, concreciones, perlas, volcanes.
- depósitos de origen biológico – son los espeleotemas formados por la acción de organismos animales o, predominantemente vegetales, por acción de deposición o erosión, o incluso por reacción microbiológica. Sus principales ejemplos son: leche de luna, espeleofototemas.
- depósitos de origen mixto – de composición química relacionados con la acción simultánea de varios mecanismos de formación. Algunos ejemplos son: cementación, anemolitas, estalactitas esféricas, pechuga de vaca, pata de elefante y otros.
Bibliografía:
Clasificación de espeleotemas. Disponible en
Espeleotemas. Disponible en