LA espermatogénesis es el proceso de formación y desarrollo de esperma. Los espermatozoides son células sexuales especializadas que tienen la mitad de los cromosomas paternos, gracias a la meiosis.

La espermatogénesis ocurre en los testículos y se refiere a los eventos en los que las espermatogonias se transforman en espermatozoides.

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A espermatogonias se encuentran en los túbulos seminíferos. Durante la pubertad, el número de espermatogonias comienza a aumentar y sufren varias mitosis, creciendo y mutando, con el objetivo de convertirse en espermatocitos primarios. Este desarrollo es estimulado por la hormona estimulante del folículo (FSH). Tanto las espermatogonias como los espermatocitos primarios son células diploides.

En su período de maduración, cada espermatocito primario sufre una división reductora o 1ra división meiótica, formando dos espermatocitos secundarios, que son haploides y aproximadamente la mitad del tamaño de la célula madre. Como en toda meiosis, se producen dos divisiones sucesivas, los espermatocitos secundarios sufren otra meiosis, formando cuatro células haploides, las espermátidas, de la mitad del tamaño de las células madre. Después de este período de maduración, las espermátidas se diferencian en espermatozoides, un proceso llamado espermiogénesis o período de diferenciación. La espermiogénesis puede tardar hasta 64 días.

Los espermatozoides maduros se componen de tres partes: cabeza, cuello y cola.

En la cabeza encontramos el núcleo haploide y el acrosoma, también llamado capuchón acrosomal y que contiene enzimas que ayudan a los espermatozoides a penetrar en la envoltura del óvulo.

El cuello es la unión entre la cabeza y la cola.

La cola se compone de tres piezas: pieza intermedia, pieza principal y pieza final. Tiene muchas mitocondrias porque necesita mucha energía para su motilidad.

Imágenes:
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