Written by Generalmente, los grupos de afinidad política tienen un promedio de entre tres y 20 personas. Los miembros, con objetivos determinados y actuando juntos directamente, organizan sistemas jerárquicos entre ellos, generalmente de acuerdo con la confianza generada entre los miembros debido a pensamientos similares. Están organizados de forma descentralizada y tienen flexibilidad.
El origen de los primeros grupos de afinidad se remonta al siglo XIX, cuando fueron creados en España por anarquistas a mediados de los años 30. Estas organizaciones se basaban en tertulias sociales y formaban el núcleo de FAI – Federación Anarquista Ibérica. Este grupo era responsable de la congregación de los miembros más idealistas que formaban parte de una enorme organización anarcosindicalista llamada Confederación Nacional del Trabajo (CNT). El modelo creado por los españoles, sin embargo, puede tener las características utilizadas en cualquier otro conjunto de afinidad. En el caso de los radicales en Estados Unidos, por ejemplo, estas organizaciones se denominaron familias, comunas o colectivos. Durante las décadas de 1960 y 1970, los grupos de afinidad se notaron en el contexto social por formar un gran movimiento contra la guerra de Vietnam, formado por hippies y activistas opuestos a la entrada de Estados Unidos en la guerra.
Grupo de afinidad fue una expresión ampliamente utilizada por Ben Morea, agitador y pintor de ideología anarquista que formaba parte de Black Mask, un colectivo radical de anarquistas que operaba en la ciudad de Nueva York en la década de 1960. en organizaciones basadas en antecedentes étnicos, de género y religiosos. e intereses, entre otros. En la época del movimiento antinuclear, en la década de 1970, se hicieron bastante populares en Europa y Estados Unidos.
También conocidos como rizomas de afinidad, los grupos de afinidad se basan generalmente en la ideología anarquista. Sin embargo, hay varias otras organizaciones que no siguen esta tendencia, sino que están organizadas por habilidades o roles comunes o actividades similares. La mayoría de las veces, los grupos de afinidad dificultan la incorporación de nuevos miembros como medida de protección. Sin embargo, algunos aceptan a los novatos de forma más abierta.
