Guerra Civil Española – definición

LA guerra civil Española, que tuvo lugar entre 1936 y 1939, fue un conflicto entre republicanos y nacionalistas por parte del gobierno de España.

En el campo de batalla, los republicanos se unieron en torno a la Frente popular que aglutinaba a los sectores democrático y de izquierda, como anarquistas y comunistas.

¿Eres estudiante, profesor o academia?

DATE DE ALTA EN NUESTRA RED SOCIAL!, Grupos de estudio, apuntes, escribe en tu propio blog, añadir tu academia o dar clases particulares y Aprende!!!.

Abrir un perfil

En el otro lado estaban las fuerzas de la derecha, articuladas alrededor de círculos como el Falange española tradicionalista y sectores de las Fuerzas Armadas, encabezados por el general Francisco Franco.

Causas de la Guerra Civil Española

guerra civil Española
Cartel republicano durante la Guerra Civil Española, fechado en 1938

Desde principios del siglo XX, España ha estado inmersa en sucesivas crisis políticas, económicas y sociales. El gobierno monárquico parlamentario fue incapaz de resolver las dificultades generadas por el atraso económico.

La estrategia fue reprimir duramente a movimientos como los sindicatos y los partidos de izquierda.

En 1923, el general Primo de Rivera había instalado una dictadura de tipo fascista, a pesar de preservar la monarquía. Esta dictadura cayó bajo la presión popular en 1930.

Al año siguiente, en medio de un profundo malestar social y político, los republicanos ganaron las elecciones municipales de 1931.

Así, un movimiento popular derroca la monarquía española, proclama la república y la familia real es expulsada a Italia.

Después del establecimiento de la República, se implementó la expansión de la educación básica y la reforma agraria.

Estas medidas atemorizaron a las élites conservadoras, que estaban compuestas por grandes terratenientes, la alta burguesía, miembros del ejército y el clero. Así, se intensificaron los conflictos entre las fuerzas de derecha e izquierda.

Las élites se unieron en un partido de extrema derecha, llamado Falange Española Tradicionalista de Juntas Ofensivas Nacional-Sindicalistas, y tenía el objetivo de prevenir las reformas que consideraba de inspiración socialista.

Inicio de la Guerra Civil Española

España vivió un período de desorden interno entre 1931 y 1936. Algunas facciones más radicales aprovecharon la oportunidad para destruir iglesias católicas, invadir tierras y tomar la justicia por sus propias manos.

En febrero de 1936, el Frente Popular, que aglutinaba a varios sectores democráticos y de izquierda -socialistas, comunistas, anarquistas, liberales- eligió a Manuel Azaña como presidente.

Poco después de las elecciones, el ejército, bajo el liderazgo del general Francisco Franco, se rebeló contra el nuevo gobierno. La Guerra Civil española se inició con un intento de golpe de Estado el 17 de julio de 1936.

El conflicto llevó a los falangistas de un lado y al otro, populares y de izquierda. El primero contó con el apoyo militar de la Italia fascista y la Alemania nazi, que utilizaron España como centro de pruebas para sus nuevas y poderosas armas.

Del otro lado estaban las fuerzas populares y democráticas. Estos recibieron poco apoyo de la Unión Soviética y las Brigadas Internacionales, que estaban integradas por trabajadores voluntarios e intelectuales de otros países.

Países democráticos como Francia e Inglaterra no participaron en el conflicto.

Consecuencias de la Guerra Civil Española

Desfile militar por la victoria de Franco
El general Franco observa el desfile militar por la victoria en la guerra de 1939

La Guerra Civil española dejó un millón de muertos y un sinnúmero de desaparecidos en tres años de combate.

Con la victoria de Franco, miles de republicanos tuvieron que salir de España para evitar ser detenidos o asesinados. Los que quedaron fueron confinados en prisiones y campos de concentración.

Franco y sus colaboradores implantaron una variación del fascismo llamada «nacional catolicismo». Esto implicó el aislamiento internacional del país y la retórica antisocialista.

España logró mantenerse al margen de la Segunda Guerra Mundial, aunque vendió materiales a la Alemania nazi y envió una fuerza a luchar en la Unión Soviética.

Francisco franco

Con la victoria de los falangistas, las fuerzas de Franco ocuparon toda España e iniciaron el régimen dictatorial, que se conoció como franquismo.

Esto significó el fin de las elecciones para el Poder Ejecutivo, la pena de muerte por delitos contra la seguridad del Estado, el predominio de la religión católica en la vida civil, entre otras medidas.

En regiones como Cataluña y el País Vasco, se prohibieron los idiomas locales y se suprimieron los símbolos regionales.

Para asegurar su liderazgo, Franco expulsó a todos los líderes que querían convertir el régimen en una versión del fascismo italiano. De esta forma, concentra los poderes institucionales en sí misma y en el Consejo de Estado, aislando a España del escenario internacional.

Cuando terminó la Segunda Guerra Mundial, Franco se vio obligado a realizar pequeñas reformas políticas para recibir ayuda exterior. Sin embargo, mantuvo la censura, la prohibición de partidos políticos y el régimen autoritario.

La dictadura fascista del generalísimo Franco duró hasta su muerte en 1975. Después de esta fecha, se restableció la monarquía parlamentaria y se promulgó una constitución en 1978.

Importancia de la Guerra Civil Española

La Guerra Civil española se convirtió en mucho más que una simple lucha por el control del gobierno de un país. Por primera vez, las dos grandes corrientes políticas del siglo XX, el fascismo y el socialismo, se enfrentaron en el campo de batalla.

De esta manera, la guerra adquirió el significado de combate entre el fascismo y la democracia. Además, los nazis experimentaron con diversas tácticas militares en España.

De ahí que muchos historiadores señalen que la Guerra Civil española fue un «ensayo» de la Segunda Guerra Mundial.

La obra Guernica y la Guerra Civil Española

El 26 de abril de 1937 ocurrió una de las mayores tragedias de la guerra.

La aldea de Guernica, ubicada en el País Vasco, fue completamente destruida por el bombardeo de aviones alemanes de la Legión Cóndor, enviados por Adolf Hitler para ayudar a las fuerzas del Generalísimo Francisco Franco.

Meses antes, el gobierno republicano había pedido al pintor Pablo Picasso que pintara un cuadro sobre un tema político para el pabellón español de la Exposición Universal de París.

Guernica de Pablo Picasso
La obra «Guernica», de Picasso, retrata la destrucción de la ciudad del mismo nombre

El artista estaba trabajando en los bocetos cuando se enteró del bombardeo de la ciudad de Guernica. Por ello, decidió crear una obra que retratara este hecho.

Más que un cuadro sobre los horrores de la guerra, con el tiempo, «Guernica» se ha convertido en un símbolo de paz.

Más información sobre este tema:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *