Tabla de contenidos
Gran glándula anexa al tracto digestivo, con múltiples y complejas funciones de síntesis y transformación de diversas sustancias. (PNA hepar.)
1. Descripción del hígado
El hígado se encuentra arriba y a la derecha del abdomen, debajo de la cúpula derecha del diafragma, que lo separa del pulmón correspondiente. Está enmascarado, por detrás y a los lados, por las costillas. Está anatómicamente relacionado con varios elementos. Arriba y atrás, está unido al diafragma por un ligamento grueso. Debajo de su superficie inferior, la vesícula biliar es contigua, a su izquierda, el pedículo hepático; esta está formada por la arteria hepática (que va de la aorta al hígado), la vena porta (que drena el tracto digestivo y va al hígado) y la vía biliar (que va del hígado a la vesícula biliar y al intestino). El hígado pesa 1,5 kilogramos en adultos. Tiene cuatro lóbulos (los lóbulos derecho e izquierdo, el lóbulo medio y el de Spiegel), cada uno dividido en uno o más segmentos. Por tanto, el hígado está formado por 8 segmentos en total, cada uno de los cuales tiene su propia vascularización. Esta segmentación permite realizar hepatectomías parciales, denominadas todavía reguladas, donde la ablación se limita a uno o pocos segmentos, como máximo 5. El hígado recibe, a través de la arteria hepática y la vena porta, sustancias químicas, que transforma y rechaza en la bilis, a través de la cual pasan a la vesícula biliar y luego al intestino, o en las venas hepáticas, desde donde pasan en la vena cava luego en toda la circulación sanguínea. Además, el hígado puede sintetizar y almacenar sustancias. Fue el fisiólogo francés Claude Bernard quien fue el primero en demostrar, mediante experimentos de “lavado” hepático, la función glucogénica de este órgano (→ glucogenogénesis, glucogenólisis), que consiste en almacenar glucosa en forma de glucógeno; en caso de deficiencia de glucosa, el hígado la libera para mantener constante el azúcar en sangre (nivel de glucosa en sangre). Esta operación se aplica a carbohidratos, lípidos, proteínas. El hígado sintetiza en particular varias proteínas del factor de coagulación: factor I (fibrinógeno), factor II (protrombina) y factores V, VII, VIII y X, cuyos niveles se reducen durante la insuficiencia hepatocelular (destrucción masiva de las células hepáticas). Estas funciones de almacenamiento y reciclaje operadas por el hígado también se aplican a las hormonas, las vitaminas y también a los tóxicos, por lo que se transforman y se vuelven inofensivos; estas sustancias son de origen interno (provenientes de órganos, tejidos) o externo (alimentos, medicamentos). La supervivencia sin hígado solo puede durar unas pocas horas. En caso de insuficiencia hepática grave e irreversible, el único tratamiento posible es un trasplante. La exploración funcional del hígado se basa en análisis de sangre. Así, la insuficiencia hepática se traduce en una disminución del nivel de determinadas proteínas (albúmina), revelada por una alteración en las pruebas de coagulación (especialmente el tiempo de protrombina). La colestasis (excreción biliar insuficiente) provoca un aumento del nivel sanguíneo de bilirrubina y fosfatasa alcalina. La citólisis (destrucción de las células hepáticas) se acompaña de un aumento del nivel sanguíneo de transaminasas. Los niveles de gamma-glutamil transpeptidasa (gamma-GT) en sangre aumentan en todas las afecciones hepáticas. La punción-biopsia hepática, realizada por vía transcutánea, permite el examen histológico del fragmento de parénquima hepático tomado. Los exámenes radiológicos adicionales del hígado son la ecografía, la tomografía computarizada y la resonancia magnética (MRI). El fibroscan permite medir la extensión de la fibrosis por vía externa. El hígado puede verse afectado por inflamación (hepatitis, de origen viral, alcohólico, tóxico), por una infección bacteriana global o localizada (absceso), por un parásito (amebiasis, quiste hidatídico), por cirrosis, por un tumor benigno o maligno ( carcinoma hepatocelular, metástasis), por determinadas enfermedades de almacenamiento (hemocromatosis, amiloidosis) o por trastornos congénitos (anomalías metabólicas, atresia del tracto biliar). Ver : alcoholismo, cáncer de hígado, cirrosis, fibrosis hepática congénita, hígado cardíaco, hepatitis, hepatocito, insuficiencia hepatocelular, esteatosis, tumor hepático benigno.
2. Función del hígado
3. Exámenes de hígado
4. Patologías hepáticas