Ser ingeniero químico es la profesión perfecta para cualquier persona que tenga un amor incondicional por la química, por las clases de laboratorio, disfrute del cálculo, sea capaz de cumplir con los plazos y trabajar en equipo. La profesión combina el conocimiento natural con la ingeniería y también permite al profesional trabajar desde una perspectiva de “minimizar los impactos ambientales sin perder el enfoque económico” (Daher, 2007: 66).
Ingeniería Química. Foto: Anatoly Tiplyashin / Shutterstock.com
Las áreas de actividad de esta rama son amplias, ya que Ingeniero químico está presente donde existen “procesos físico-químicos relacionados con la elaboración de productos”. Así, su implicación con la industria va “desde el diseño de las fábricas, a la investigación en el laboratorio, a la venta de equipos”, destaca Valquíria Daher, de Jornal O Globo. Además, sabe valorar las consecuencias medioambientales y económicas que conlleva todo el proceso de industrialización.
De esta forma, el ingeniero químico puede trabajar, según Daher, “en industrias química, petroquímica, alimentaria, textil, farmacéutica, cosmética, plásticos, materiales de construcción, vidrio, alcohol, caucho, biotecnología”, entre muchas otras.
El curso tiene una duración media de cinco años e incluye materias básicas como química y matemáticas, y luego específicas como cálculo, diseño, control e instrumentación de procesos de reactores. Las clases se imparten constantemente en laboratorios y la carga de trabajo de materias como química orgánica e inorgánica es extensa. Se recomienda que el alumno, además de dominar, disfrute mucho de las matemáticas.
La industria petrolera ubicada en Macaé – RJ ha sido el principal contratista de ingenieros químicos en el país. Para quienes ya están en el mercado, las áreas de acero, petroquímica y polímeros son buenos caminos. Este profesional también puede trabajar en consultoría y proyectos, pudiendo incluso ocupar cargos administrativos, ya que su formación lo prepara para “conciliar conocimientos técnicos con visión empresarial”.
¿Qué esperan las empresas del ingeniero químico? Que encuentre formas de reducir la pérdida de materias primas, presente soluciones para la reutilización de los residuos industriales y garantice un proceso productivo tecnológicamente más limpio, sin dañar el medio ambiente y económicamente rentable.
MERCADO DE TRABAJO
Es estable y las mayores oportunidades están vinculadas a la seguridad industrial y al petróleo. Con el creciente rigor de la legislación medioambiental, también existen ofertas en áreas relacionadas con el medio ambiente.
El gran desafío del ingeniero químico es unir conocimientos técnicos y gerenciales, debido al carácter multidisciplinario de la profesión, y mantenerse actualizado, dado el tamaño de la diversidad de la industria química. Necesita dominar el inglés y el español, debido al MERCOSUR. Lo ideal es que te especialices, y el consejo es que es la seguridad industrial y el aceite, los que tienen mucha demanda. Para aquellos que deseen enseñar, se requieren títulos de maestría y doctorado.
Los sueldos por los que se está iniciando oscilan entre R $ 1.800 y R $ 3.000, según el área de especialización. Puede haber adiciones si el lugar de trabajo se considera riesgoso, como en laboratorios o en plataformas, donde el profesional está fuera de casa durante mucho tiempo.
Fuentes
DAHER, Valkyrie. Revista Guía de profesiones. Río de Janeiro, Ediouro, O Globo, 2007, p. 66-7.