Tabla de contenidos
Político francés (París 1946).
1. ¿Un joven precoz con prisa?
Nacido en 1946 en el seno de una rica familia de anticuarios, Laurent Fabius cursó brillantes estudios antes de incorporarse a la École normale supérieure, siendo recibido como cacique en la agregación de letras modernas, ingresando en el Instituto de Estudios Políticos de París y luego en la ENA desde donde salió entre los tres primeros. Se convirtió en maestro de solicitudes en el Consejo de Estado y fue advertido por Jacques Attali que lo llamó al lado de François Mitterrand, entonces primer secretario del Partido Socialista (PS) ansioso por fortalecer su equipo de asesores.
Miembro del PS desde 1974, fue teniente de alcalde de Grand-Quevilly en 1977, diputado por Seine-Maritime al año siguiente, y se estableció una base sólida en la aglomeración de Rouen que lo elegiría a partir de entonces sin cesar. En 1981, fue nombrado Ministro de Presupuesto en los gobiernos de Mauroy, responsable en particular de la introducción de un impuesto a las grandes fortunas, luego Ministro de Industria e Investigación (1983), rodeado de brillantes técnicos.
Nombrado Primer Ministro en 1984, es, a la edad de 37 años, el titular más joven del cargo de la República. Hasta 1986, trabajó para acentuar el giro de la austeridad y enderezar las cuentas del país. Las desilusiones de la opinión pública y la erosión del poder contaron más en la derrota legislativa de 1986 que los desacuerdos sobre política exterior que surgieron en lo más alto del estado entre el presidente y su segundo, o los escándalos del gobierno. Guerrero arcoiris luego sangre contaminada que empañará su imagen de manera más duradera.
2. ¿Un elefante indomable del PS?
Miembro del Parlamento Europeo (1989-1992), Laurent Fabius se enzarza en una lucha de brazos con uno de los otros grandes herederos de F. Mitterrand que se convirtió en ministro, Lionel Jospin, pero dos veces fracasa en la cabeza del PS. Participando en un desastroso congreso de Rennes porque avaló los profundos conflictos y divisiones internas de la formación, L. Fabius acabó tomando las riendas del movimiento dos años después (1992-1993). Presidente de la Asamblea Nacional de 1988 a 1992, se convirtió en líder de lo que queda del grupo socialista en el Hemiciclo, luego de la berezina de las elecciones legislativas de 1993; impedido de competir por las consecuencias del escándalo de sangre contaminada, apoya sin éxito a Henri Emmanuelli contra L.Jospin para la candidatura presidencial de 1995.
L. Fabius vuelve a encontrar el puesto cuando L. Jospin lidera el partido y el plural sale a la victoria en las elecciones que siguieron a la disolución de la Asamblea en 1997. En 2000, sucede a los efímeros Christian Sautter y Dominique Strauss-Kahn enredados en una serie de casos como ministro de Economía y Finanzas y peso pesado en el gobierno de Jospin. En este puesto, lidera una política bastante liberal de recorte de gastos y, especialmente, desgravación fiscal. Preside el cambio del franco al euro.
Después del trauma del 21 de abril de 2002, en el que L. Jospin quedó tercero detrás de Jean-Marie Le Pen en la primera vuelta de las elecciones presidenciales, dirigió la campaña legislativa que siguió en una posición muy difícil y no ocultó sus ambiciones. . Si F. Hollande es reelegido al frente del partido en 2003, L. Fabius, que se convierte en su segundo y que analiza el fracaso de 2002 por el abandono de las clases populares y su miedo a la globalización, juega ahora una partitura claramente marcada. izquierda. Asimismo, a riesgo de causar revuelo en su formación y volver a dividir al PS, la mayoría de los cuales están a favor de su ratificación, está muy claramente a favor del «no» al referéndum sobre el tratado por el que se establece una Constitución europea. (2005). Es también esta línea la que defiende en el marco de las primarias internas al PS en otoño de 2006. Llegado último con el 18,7% de los votos detrás de D. Strauss-Kahn y Ségolène Royal, L. Fabius aporta sin barguigner su apoyo a la uno que los militantes han designado para lucir sus colores en las elecciones presidenciales de 2007 y está comprometido con la campaña a su lado.
3. ¿En la maniobra o en la fila?
Si probablemente contribuye con la inquietante pregunta sobre el proyecto del IVA social que plantea en un televisor al ministro de Economía de Nicolas Sarkozy, Jean-Louis Borloo, en la noche de la primera vuelta de las elecciones legislativas para limitar la anunciada debacle de su Partido, L. Fabius permanece en las sombras, dejando a sus seguidores como Claude Bartolone o jóvenes esperanzas como Benoît Hamon para mover los hilos de las corrientes y los equilibrios del PS. Lo cierto es que apoya la candidatura de Martine Aubry al Congreso de Reims de 2008, en virtud de un supuesto pacto de no agresión que lo vincularía tanto con el nuevo secretario nacional como con D. Strauss-Kahn con vistas a la elección presidencial de 2012.
Tras la inhabilitación por moralidad de este último en la primavera de 2011, aparentemente se alinea detrás de la candidatura del Sr. Aubry en las primarias ciudadanas que su partido está organizando para el otoño. Pero se recupera y no apoya con menos rigor, consistencia y firmeza a F. Hollande cuando este último se invierte al finalizar la segunda vuelta de esta inédita papeleta; hasta el punto de convertirse en un eslabón imprescindible en su sistema de campañas. Una vez lograda la victoria, es esta lealtad sumada a su experiencia la que se ve recompensada con su nombramiento en el prestigioso Quai d’Orsay en el gobierno de Ayrault en mayo de 2012 con, además, el rango de número dos, justo detrás del Primer Ministro. Paradoja o coincidencia, sucede este cargo y como tal de Alain Juppé, quien, como él, combina excelencia, destreza y altísimas ambiciones destrozadas.
4. Ministro de Relaciones Exteriores de François Hollande
Consciente de no poder postularse más para el cargo supremo, dirige la diplomacia de Francia con la preocupación de servir al presidente y, sin embargo, dejar su huella en la historia del ministerio. Asiste así al Jefe de Estado en los esfuerzos que está desplegando con distintos grados de éxito para cambiar la drástica política de austeridad de la UE, promover la imagen y las habilidades del país en todo el país, el planeta y recuperar el legado de «Françafrique». Toma nota de la retirada de las tropas de Afganistán y trabaja para combatir la amenaza islamista en Mali desde enero de 2013 al mismo tiempo que busca una solución al conflicto interno sirio abogando por el apoyo y la provisión de ayuda. Asad.
Partidista, con F. Hollande, de una intervención contra este último a finales del verano de 2013, debe resignarse a dejar de lado el proyecto tras la deserción británica, la procrastinación estadounidense y la resistencia china y sobre todo rusa. No obstante, continúa defendiendo la causa con regularidad y no deja de mostrar su apoyo a la Coalición Nacional Siria (CNS). Manteniendo una línea dura, obtuvo concesiones adicionales de los iraníes durante las negociaciones que condujeron al acuerdo internacional sobre desarme nuclear de Teherán a Ginebra en noviembre. Al mismo tiempo, está haciendo campaña por un compromiso militar para restaurar la paz en una República Centroafricana en las garras de la guerra civil. Y no dudó en cruzar espadas con los intereses rusos cuando, en marzo de 2014, se agravó la crisis ucraniana.
En un tiempo previsto para suceder a J.-M. Ayrault como Primer Ministro, L. Fabius se convierte en el aliado objetivo del Sr. Valls que hereda las llaves de Matignon tras la derrota de los socialistas en las elecciones municipales de finales de marzo de 2014. En el gobierno endurecido que éste reorganiza, conserva el título de número 2 así como el Quai d’Orsay, del cual aumenta el perímetro, agregando, por primera vez, Comercio Exterior, de acuerdo con la dimensión económica de la que se ocupa de recordar la importancia dentro de Relaciones Exteriores, a fortiori en tiempos de crisis. Y convertirse en el campeón del turismo, un importante proveedor de divisas y empleo. Finalmente, deseoso de acreditar a Francia y al Jefe de Estado con un acuerdo climático integral en el marco de la COP21 (Conferencia Internacional de las Naciones Unidas) que París acogerá a finales de 2015, está aumentando el número de visitas, intercambios y mediaciones previas. .
Apoyando la intervención de las fuerzas aéreas en el marco de la coalición internacional contra la organización Estado Islámico de Irak desde septiembre de 2014, trabaja para profundizar los lazos con las monarquías del Golfo, reitera la firme oposición de Francia a cualquier negociación con el régimen de Asad en Siria y sigue manteniendo una línea intransigente sobre la energía nuclear iraní. También está maniobrando, con su homólogo alemán en particular, para lograr una apariencia de desescalada de la tensión entre Rusia y Ucrania. Y, en 2015, ayudó al presidente en su mediación entre el poder de extrema izquierda resultante de las urnas en Atenas y los socios europeos en el tema de la espinosa deuda griega.
En febrero de 2016, F. Hollande lo eligió para suceder a Jean-Louis Debré al frente del Consejo Constitucional.
Para obtener más información, consulte el artículo. Francia: vida política desde 1958