Trompetista, pianista y compositor de jazz estadounidense (Davenport 1903-Nueva York 1931).
Fue el primer músico blanco que desarrolló un estilo original de Dixieland. La elegancia y el refinamiento de su música lo convierten en uno de los precursores del llamado jazz “cool”, ofreciendo así una fugaz alternativa al genio de Louis Armstrong.
Se convirtió en leyenda como el primer gran músico blanco y el primer artista de jazz maldito. Su vida, idéntica en muchos aspectos a la de F. Scott Fitzgerald y su Hijos del jazz– habitada por una furia y un mal de la vida, devorada por la música y destruida por el alcohol, inspiró a la novelista Dorothy Baker en su novela El joven de la trompeta, traducido por Boris Vian, quien admiraba al músico. Atormentado, descontento («creo que fue por su perfeccionismo que bebió tanto», declara su discípulo, el trompetista Jimmy McPartland), trajo al jazz una connotación romántica con un indefinible acento melancólico, un perfume impresionista, un refinamiento que lo convierte en el primer solista frio de la historia del jazz y precursor del arte de Miles Davis; un uso muy personal del vibrato, un timbre rico en armónicos, un tono suave y cálido son características de este entusiasta de la música.
Autodidacta, inventó una técnica para la corneta, desarrollando sus propias digitaciones; en el piano, capaz de reproducir de oído cualquier melodía, mostró en En una niebla (el único solo que grabó en el instrumento) su conocimiento de los compositores europeos que escuchó (Ravel, Debussy, Stravinsky).
A los quince años, Beiderbecke se interesó por el jazz escuchando a las orquestas que tocaban en el barcos fluviales, en el que jugará él mismo en 1923, antes de unirse a los Wolverines en Chicago, el primer equipo blanco que ha jugado con cierto swing y del que se convierte en protagonista.
En 1925, tocó en la orquesta de Charly Straight, aprendiendo los arreglos de memoria, ya que no sabía leer música. Luego encontró, en septiembre del mismo año, al saxofonista Frankie Trumbauer y ambos ingresaron en la formación de Jean Goldkette.
Al año siguiente, grabaron bajo el nombre de Gang de Bix Beiderbecke, antes de pasar a Paul Whiteman engalanado abusivamente con el título de “Rey del jazz” (!), “Buen apóstol del jazz sinfónico” (!). Desesperado por no poder lograr grandes ambiciones, Bix bebe cada vez más, se somete a un tratamiento de desintoxicación del que sale roto; Whiteman no lo vuelve a contratar. Todavía juega de vez en cuando; su organismo ruinoso no pudo vencer la neumonía, de la que murió en la madrugada del 7 de agosto de 1931. Tenía sólo veintiocho años.