La Masonería se trata de una hermandad universal, posiblemente nacida, según algunos estudiosos, del gremio de trabajadores que, en la Edad Media, se dedicaron a construir catedrales. Habrían instituido su propia asociación, conocida como Masonería Operativa.

albañilería

¿Eres estudiante, profesor o academia?

DATE DE ALTA EN NUESTRA RED SOCIAL!, Grupos de estudio, apuntes, escribe en tu propio blog, añadir tu academia o dar clases particulares y Aprende!!!.

Abrir un perfil

Estos constructores iban de trabajo en trabajo, gratis, sin necesidad de pagar impuestos ni de satisfacer a la nobleza ni a la Iglesia. De ahí que se les llamara masones – masones o franco-masones – porque a diferencia de otros profesionales en este campo, tenían el poder de cortar la piedra en bruto. Estos trabajadores ganaron cada vez más protagonismo entre los siglos XII y XIV.

Esta sociedad estuvo profundamente influenciada por los cambios ocurridos durante el Renacimiento. La Reforma Protestante, el intenso desarrollo científico, los cambios de paradigma, abrieron espacio para la concepción de Dios como el “Gran Arquitecto”, creador de un universo regido por leyes inmutables. Creer en esta visión de Dios caracterizaría fuertemente a la masonería.

En este contexto, esta sociedad se ha desarrollado. Algunos afirman que habría existido desde siempre, y no es posible especificar su tiempo y lugar de origen. Otros dicen que su origen se remonta a algún tiempo antes de la venida de Cristo. En cualquier caso, sobrevivió a varias transformaciones ocurridas en la época medieval y en la transición al Renacimiento. Al principio los ‘albañiles’ mantuvieron el sindicato a través de las asociaciones corporativas conocidas como gremios, hasta el siglo XVI.

Como medio de protegerse de los impostores, los ‘masones’ crearon formas de identificarse con los demás, y desde principios del siglo XVII, con el fin de la era de las grandes obras arquitectónicas, los hombres prominentes de la sociedad fueron aprobados como ‘aceptados albañiles ‘o’ albañiles aceptados ‘. Con el tiempo, estos predominaron sobre los trabajadores, caracterizando a la masonería, a partir de este momento, como un grupo de carácter filosófico, ya no operativo.

Sus seguidores se dedican al ejercicio de la justicia, de la humanidad, consagrando el ejercicio de la libertad, la democracia, la igualdad, la fraternidad. Persiguen el desarrollo intelectual con la misma diligencia, constituyéndose así en una sociedad iniciática, filosófica, filantrópica y educativa. Se reúnen en grupos conocidos como Lojas, también conocidos como tiendas simbólicas, tiendas azules o tiendas de trabajadores, todas autónomas entre sí. Es en ellos donde se llevan a cabo los rituales de iniciación, es decir, los ritos que permiten ingresar a un candidato, que pasa por varias etapas, recibiendo en secuencia los grados de aprendiz, compañero y maestro Masón.

La masonería da una importancia inigualable a la jerarquía y los símbolos. Cada tienda está compuesta por un Venerable Maestro o Presidente, quien dirige las sesiones; por el Primer Vigilante, que se ocupa de la administración y la disciplina; por el Segundo Vigilante, el maestro de los aprendices; por un Ponente, que condensa las actas y recoge todas las conclusiones planteadas en la reunión; por el Secretario, quien redacta las actas y las conserva, además de asegurar la interacción administrativa entre la tienda y los pedidos superiores; por un Maestro de Ceremonias, que guía a los hermanos dentro del grupo y lleva a cada visitante a sus respectivos lugares; por el Tesorero, quien recauda los fondos y se encarga del orden financiero; y la Guardia del Templo, que vigila la entrada al Templo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *