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LA Organización Internacional del Trabajo (OIT) es una agencia de la ONU con el objetivo de promover el trabajo decente en todo el mundo.
La OIT fue fundada en 1919, tiene 185 países miembros y 40 oficinas repartidas por los cinco continentes.
Origen
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) fue creada en 1919 con el Tratado de Versalles, al final de la Primera Guerra Mundial (1914-1918).
Se entendió que el trabajo era parte integral de la dignidad humana y esencial para garantizar la paz mundial. Sin embargo, debido a los cambios provocados por la Revolución Industrial, fue necesario establecer un mínimo de condiciones dignas para todas las actividades.
Así, la OIT comenzó a investigar y analizar este universo y a redactar informes sobre esclavitud, trabajo infantil, explotación, etc.
A través de acuerdos y reuniones, la OIT se ha convertido en un foro donde trabajadores, empleadores y gobiernos pueden sentarse y discutir propuestas que traen beneficios a la sociedad.
La OIT pasó a formar parte automáticamente de las Naciones Unidas cuando se creó en 1946. La sede de la agencia se encuentra en Ginebra y sus idiomas oficiales son el inglés, el francés y el español.
Convenciones
La OIT celebra una conferencia internacional anualmente para discutir y evaluar la dirección del mundo del trabajo en diferentes países del mundo.
De ahí surgen convenciones, normas y tratados que pueden ser ratificados o no por los países miembros. En los últimos años, Brasil ha adoptado una serie de convenciones que han causado controversia en la sociedad brasileña.
Convenio núm. 169
Brasil se convirtió en signatario del Convenio 169 en 1989 y lo ratificó en 2003. Este convenio recomienda que el gobierno central informe y consulte con las comunidades indígenas y tribales cuando cualquier ley gubernamental afecte directamente sus tierras.
Esta convención disgustó a muchos sectores que ven en esta ley un intento de socavar la soberanía del territorio nacional.
Convenio núm. 189
Es aquella que busca mejorar las condiciones laborales de los empleados domésticos. Las leyes que protegen a este tipo de empleados ya se habían ampliado en 2013, garantizando derechos básicos como las vacaciones y un máximo de 44 horas semanales.
Metas
La OIT se basa en el principio de que el trabajo debe combinarse con la justicia social para garantizar la paz. En el siglo XXI, sus objetivos son:
- Abolición del trabajo esclavo
- Eliminación de la discriminación de género, raza, color y religión en el trabajo
- Erradicación del trabajo infantil
- Libertad de asociación, sindicalización y negociación colectiva.
Para lograr uno de los objetivos de la Agenda 2030 propuesto por la ONU, la Organización Internacional del Trabajo promueve el «trabajo decente».
El trabajo decente sería aquel que garantice a la persona dignidad, igualdad, salarios justos y condiciones seguras para la realización de los mismos.
Datos
Una de las tareas más importantes de la OIT es investigar y compilar estadísticas para ayudar a los gobiernos y las instituciones a mejorar las condiciones laborales de sus ciudadanos. Aquí hay unos ejemplos:
Trabajo infantil
Según cifras elaboradas por la OIT en 2016, hay 152 millones de niños entre 5 y 17 años que trabajan en el mundo. En Brasil, 2,7 millones de niños, niñas y adolescentes son víctimas de este sistema.
Trabajo forzado
En 2016, 40 millones de personas fueron víctimas de trabajo forzoso. La esclavitud moderna afecta especialmente a niñas y mujeres, alcanzando la cifra del 71%.
En Brasil, el número se invierte, ya que el fenómeno está vinculado a la expansión de la ganadería que utiliza mano de obra masculina. El 83% de estos trabajadores tienen entre 18 y 44 años y el 33% son analfabetos.
Trabajo doméstico
En 2013, había 67 millones de trabajadores domésticos adultos en el mundo. La mayoría de ellos no son miembros de sindicatos.
En 2016, Brasil tenía 6.158 millones de trabajadores domésticos, de los cuales el 92% eran mujeres. Solo el 4% de estos estaban afiliados a algún sindicato.
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