Written by Nicolás I fue el Papa número 105 en la historia de la Iglesia Católica.
Nacido en Roma en el año 815, Nicolás Collona Inició su vida religiosa a muy temprana edad. Conquistó su espacio entre los católicos y, con la muerte del Papa Benedicto III, fue elegido para el cargo de Sumo Pontífice el 24 de abril de 858, cuando tenía 43 años, tomando el nombre de Nicolás I.
El Papa Nicolás I se consagró en la historia de la Iglesia Católica para consolidar el poder y la autoridad papal. Desde el momento en que el Imperio Romano reconoció el catolicismo como religión oficial, el poder de la Iglesia se expandió enormemente, interfiriendo en todos los asuntos de la vida humana. La Iglesia Católica se convirtió en un personaje fundamental para la comprensión de la historia humana, ya que sus determinaciones interfirieron en todas las esferas de la vida. Nicolás I reclamó el poder supremo para enseñar y gobernar para los papas. Su papado representó una expansión extrema del poder, ya que subordinó a todos al poder del Papa y de la Iglesia Católica.
La Iglesia Católica, compuesta por hombres, es una institución política como cualquier otra, que se disputa espacio e influencia con las demás. Naturalmente, el movimiento de Nicolás I encontró a varios oponentes insatisfechos con la expansión del poder del catolicismo. El primero en surgir como opositor al poder de Nicolás I fue el arzobispo de Rávena, que intentó independizarse de Roma. Tras el choque ideológico, el arzobispo acabó por someterse a las determinaciones de Nicolás. Otro choque de intereses se produjo con el rey Lotario II del Sacro Imperio Romano Germánico, que pretendía anular su matrimonio para casarse con su amante Waldrada. Un sínodo se reunió para justificar la decisión en Metz, pero el Papa Nicolás I revocó y condenó la decisión del sínodo por violar la doctrina de la indisolubilidad del matrimonio. Incluso bajo presión, Nicolás I no cambió su decisión.
Nicolás I fue un papa importante a principios de la Edad Media. Ortodoxo, combatió cualquier actitud que pudiera atentar contra la doctrina tradicional de la Iglesia Católica. Su firme postura conquistó aún más espacio para el catolicismo, ganando una disputa de intereses que dio a la Iglesia un poder que se expandiría a lo largo de la Edad Media. Considerado por sus contemporáneos como un profeta, murió el 13 de noviembre de 867, a la edad de 52 años, y fue sucedido por Adriano II. El Papa Nicolás I recibió el nombre de Magnus y fue consagrado santo por la Iglesia Católica, siendo llamado San Nicolás el Grande.
Fuentes:
http://www.dec.ufcg.edu.br/biografias/PPNicol1.html
FISCHER-WOLLPERT, Rudolf. Los Papas y el Papado. Petrópolis: Editora Vozes.
