Reducción de la concentración de la solución por dilución o mezcla – Química

Una solución puede reducir su concentración básicamente mediante dos procesos distintos: dilución (en el que se incrementa su volumen de disolvente, y consecuentemente, también el de solución) o mezclando otra solución (o el mismo soluto, pero menor concentración, o diferente soluto, que no reacciona químicamente con el de la solución original). En ambos casos, tenemos un aumento en el volumen final de solución, sin un aumento de soluto, lo que conduce a una reducción de la concentración.

El proceso de dilución, más común en la reducción de la concentración de soluciones, consiste en aumentar el volumen de la solución mediante la adición de solvente, resultando en una reducción de la concentración. La dilución no solo está presente en el laboratorio de química, en el día a día, este proceso está presente cuando, por ejemplo, agregamos agua a los frijoles o agregamos agua a un jugo de fruta concentrado. En ambos casos, estamos aumentando el volumen de solución y reduciendo la concentración de soluto en esta solución.

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Matemáticamente, podemos expresar la dilución a través de cualquiera de las concentraciones más utilizadas: común (C), molar (M) y normal (N), según las siguientes ecuaciones:

  • Concentración común; C1 V1 = Cdos Vdos
  • Concentración molar; METRO1 V1 = Mdos Vdos
  • Concentración normal; norte1 V1 = Ndos Vdos

En el caso de una mezcla entre dos o más soluciones, puede haber tres posibilidades distintas:

  1. el que consta del mismo soluto;
  2. el constituido por distintos solutos, pero que no reaccionan químicamente entre sí;
  3. o incluso la formada por distintos solutos, pero con la ocurrencia de una reacción química.

En cuanto a la tercera, existe la formación de especies químicas distintas a las iniciales, por lo que ya no se pueden considerar las concentraciones iniciales de solutos, ya que estos (o al menos uno de ellos) dejarán de estar presentes en la solución resultante. En cuanto al segundo y tercer proceso, hay una reducción de la concentración, ya que, en el caso del segundo caso, la concentración de soluto de la segunda solución se encuentra en una concentración menor que la de la primera.

Aún tratando con la mezcla abordada en el segundo proceso, es bastante común mezclar dos o más soluciones compuestas por el mismo soluto. En este caso, deben agregarse los volúmenes individuales y la concentración resultante siempre será intermedia a las concentraciones individuales. Matemáticamente, al igual que ocurre con el proceso de dilución, la mezcla de dos o más soluciones también se puede expresar a partir de cualquiera de las más utilizadas: común (C), molar (M) y normal (N), según las siguientes ecuaciones:

  • Concentración común; C1 V1 + Cdos Vdos = C3 V3
  • Concentración molar; METRO1 V1 + Mdos Vdos = M3 V3
  • Concentración normal; norte1 V1 + Ndos Vdos = N3 V3

Referencias:
PERUZZO, Francisco Miragaia (Tito); CANTO, Eduardo Leite; La química en el enfoque de la vida cotidiana, Ed. Moderna, vol.1, São Paulo / SP-1998.
SARDELLA, Antonio; MATTHEW, Edegar; Curso de Química: química general, Ed. Ática, São Paulo / SP – 1995.

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