Written by LA sarna, popularmente conocido como sarna humana, es una enfermedad cutánea contagiosa, que tiene como agente etiológico un ácaro de la especie Sarcoptes scabiei.
La transmisión de este parásito se produce a través del contacto directo entre personas y al compartir la ropa. Esta condición es común entre los humanos y no está relacionada con una mala higiene, aunque es más común en ambientes con mucho hacinamiento y poca higiene.
Este ácaro se alimenta de queratina, la proteína que forma la capa externa de la piel. Como resultado del apareamiento, la hembra pone huevos (en promedio seis por hembra), que eclosionan después de dos semanas.
Entre dos y seis semanas después del contacto con un individuo infectado o con objetos personales del mismo, surgen manifestaciones clínicas. A medida que este ácaro perfora la piel de su huésped, provoca lesiones cutáneas (erupciones), acompañadas de un intenso picor, que se presenta especialmente durante la noche.
Las lesiones aparecen como un pequeño trayecto lineal de color de la piel o un poco de enrojecimiento, y estas no suelen observarse, ya que el acto de rascarse las vuelve irreconocibles. En la mayoría de los casos, las manchas diminutas tienen cicatrices o están cubiertas de costras. El ácaro en sí no es peligroso, pero, debido al picor, pueden producirse infecciones secundarias que pueden ser graves, especialmente en pacientes con enfermedades que afectan al sistema inmunológico.
Las zonas más afectadas por este parásito entre los dedos de manos y pies, alrededor de muñecas y codos, en las axilas, en el pliegue de la rodilla y alrededor de la cintura; sin embargo, puede afectar cualquier área del cuerpo. En niños pequeños y lactantes es común afectar la cabeza, el cuello y las palmas de las manos.
Los individuos que han sido afectados por el parásito en el pasado pueden desarrollar síntomas a los pocos días, ya que han sido sensibilizados previamente, además de presentar síntomas más leves.
El diagnóstico se obtiene mediante un examen clínico y se puede confirmar al observar el ácaro a través de un microscopio.
El tratamiento se realiza con insecticidas especiales o sarna. Estos deben aplicarse en todo el cuerpo, excepto por encima de la nariz y la línea de las orejas, durante aproximadamente 3 días. Es sumamente importante que la aplicación se realice nuevamente después de 7 a 10 días para combatir el ácaro de los huevos que no habían eclosionado durante la primera aplicación. Algunos medicamentos por vía oral también son útiles en el tratamiento de esta afección, siendo estos en una sola dosis, que puede ser necesario repetir después de 1 semana.
Toda la familia y / o parejas deben someterse a un tratamiento simultáneamente para que no haya reinfestación. Además, es importante destacar que la ropa, tanto de cama como de uso personal, debe estar esterilizada.
Fuentes:
http://www.dermatologia.net/novo/base/doencas/sarna.shtml
http://www.abcdasaude.com.br/artigo.php?183
http://www.drashirleydecampos.com.br/noticias/21337
http://en.wikipedia.org/wiki/Sarna
http://drauziovarella.com.br/doencas-e-sintomas/sarna-escabiose/
