Síndrome de Raynaud –

LA Síndrome de Raynaud es una enfermedad en la que las bajas temperaturas o el estrés emocional provocan espasmos vasculares que bloquean el flujo sanguíneo a los dedos de las manos y los pies (en algunos casos este trastorno puede ocurrir en los oídos y la nariz).

Solo hay dos tipos de esta enfermedad: la enfermedad de Raynaud primaria: es la más común y se presenta por sí sola. Enfermedad de Raynaud secundaria: se asocia con enfermedades de las arterias como: aterosclerosis; Enfermedad de Buerger; artritis reumatoide; Síndrome de Sjogren; esclerodermia y lupus eritematoso sistémico. Cuando la enfermedad de Raynaud secundaria no se trata, puede producirse una gangrena de estas extremidades. Otras causas de este trastorno pueden ser: lesiones repetitivas (especialmente vibraciones como las que se producen al escribir o tocar el piano); sobredosis de determinados medicamentos (betabloqueantes, quimioterápicos, medicamentos que contienen estrógenos, entre otros) y tabaquismo. Este síndrome afecta, en la mayoría de los casos, a mujeres de entre 15 y 40 años.

¿Eres estudiante, profesor o academia?

DATE DE ALTA EN NUESTRA RED SOCIAL!, Grupos de estudio, apuntes, escribe en tu propio blog, añadir tu academia o dar clases particulares y Aprende!!!.

Abrir un perfil

Se desconocen las causas de este trastorno, pero es probable que estén relacionadas con una anomalía del sistema nervioso simpático. Se cree que la enfermedad secundaria de Raynaud es causada por la enfermedad asociada.
La supresión del flujo sanguíneo hace que los dedos, la nariz y las orejas se pongan blancos y luego azules. Cuando el flujo sanguíneo regresa a las extremidades, estas áreas se vuelven rojas y luego vuelven a su color normal. Estos episodios pueden durar minutos o incluso horas y causar dolor y hormigueo.

Las formas de paliar los síntomas de un ataque son: sumergir los dedos en agua tibia lo antes posible, evitar ambientes con bajas temperaturas, abrigarse, colocar las manos en lugares cálidos del cuerpo (axilas y abdomen) y estimular la sangre. fluir moviendo los dedos y los brazos en círculos amplios, por ejemplo.

Cuando las medidas antes mencionadas fallan, los medicamentos pueden ayudar a aliviar los síntomas e incluso las posibles ulceraciones cutáneas que se hayan formado. Dichos medicamentos pueden ser: bloqueadores de los canales de calcio, como nefidipina; alfabloqueantes como prazosina; y vasodilatadores como la crema de nitroglicerina. También es posible inyectar drogas en el nervio simpático, responsable de la constricción de los vasos sanguíneos.

AVISO LEGAL: La información proporcionada en esta página solo debe usarse con fines informativos y nunca puede usarse como sustituto de un diagnóstico médico por un profesional calificado. Los autores de este sitio están exentos de cualquier responsabilidad legal derivada del mal uso de la información aquí publicada.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *