O modo de producción capitalista es la forma en que se organiza un sistema productivo con el objetivo de obtener ganancias.
Este sistema reemplazó el modo de producción feudal en Europa y se extendió por todo el mundo en los siglos posteriores.
Producción capitalista
A lo largo de la historia de la humanidad, ha habido varias formas de producir bienes, ya sean alimentos, ropa o vehículos. Podemos mencionar el modo de producción asiático, esclavista, feudal y capitalista.
La palabra capitalismo proviene de “capital”, es decir, el dinero necesario para iniciar una empresa.
El modo de producción capitalista está orientado a las ganancias. Este es el resultado de la inversión que realiza un emprendedor, luego de la venta de sus productos o servicios.
En el capitalismo, el motor de las relaciones productivas y sociales es el dinero. Para que circule, el capitalismo convierte todo en mercadería, ya que estas se pueden comprar y vender, a cambio de dinero.
Para animar a la gente a comprar y consumir, el capitalismo acaba creando necesidades que no existen, lanzando nuevos productos, para que los individuos puedan seguir gastando su dinero.
Con esta mentalidad, todo lo que no trae beneficios no se usa sino que se descarta. Por otro lado, se explota lo que genera ganancias.