Sangre: función, componentes y tipos

O sangre es un tejido líquido formado por diferentes tipos de células suspendidas en el plasma. Circula por todo nuestro cuerpo, a través de venas y arterias.

Las venas transportan sangre desde los órganos y tejidos al corazón, mientras que las arterias transportan sangre desde el corazón a los órganos y tejidos.

Las células, por otro lado, reciben sangre a través de vasos sanguíneos más pequeños llamados arteriolas, vénulas y capilares.

Un adulto circula, en promedio, seis litros de sangre.

Funciones de la sangre

Una de las funciones básicas de la sangre es el transporte de sustancias, de las que destacan las siguientes:

  • Lleva oxígeno y nutrientes a las células;
  • Eliminar las sobras de las actividades celulares (como el dióxido de carbono producido en la respiración celular) de los tejidos;
  • Conduce hormonas a través del cuerpo.

La sangre juega un papel importante en la defensa del cuerpo de las acciones de agentes nocivos.

Composición de la sangre

Composición de la sangre
Composición de la sangre

La sangre parece un líquido homogéneo, sin embargo, con la observación al microscopio se puede apreciar que es heterogénea, estando compuesta por glóbulos rojos, glóbulos blancos, plaquetas y plasma.

El plasma, que corresponde hasta al 60% del volumen sanguíneo, es la parte líquida donde se suspenden los glóbulos rojos, los glóbulos blancos y las plaquetas. La cantidad de cada componente puede variar según el sexo y la edad de la persona.

Algunas enfermedades, como la anemia, también pueden provocar cambios en los valores normales de los componentes sanguíneos.

Glóbulos rojos

glóbulo rojo
Glóbulos rojos dentro de una arteria

Los glóbulos rojos, también llamados glóbulos rojos, son células en mayor número en los seres humanos. Tienen la forma de un disco cóncavo en ambos lados y no tienen núcleo.

Son producidos por la médula ósea, rica en hemoglobina, una proteína cuyo pigmento rojo da a la sangre su color característico. Tiene la propiedad de transportar oxígeno, jugando un papel fundamental en la respiración.

Globulos blancos

Globulos blancos
Glóbulos blancos visualizados mediante microscopía electrónica

Los glóbulos blancos, también llamados leucocitos, se producen en la médula ósea. Son células de defensa del organismo que pertenecen al sistema inmunológico.

Destruyen agentes extraños, como bacterias, virus y sustancias tóxicas que atacan nuestro organismo y provocan infecciones u otras enfermedades. Además, también juegan un papel importante en la coagulación de la sangre.

En la sangre existen varios tipos de leucocitos con diferentes formas, tamaños y formas de núcleo: neutrófilos, monocitos, basófilos, eosinófilos y linfocitos.

Los leucocitos son más grandes que los glóbulos rojos, sin embargo, la cantidad de ellos en la sangre es mucho menor. Cuando el cuerpo es atacado por agentes extraños, la cantidad de leucocitos aumenta significativamente.

Plaquetas

Plaquetas
Las plaquetas son fragmentos de células sin núcleo.

Las plaquetas, también llamadas trombocitos, no son células, sino fragmentos celulares. Su función principal está relacionada con el proceso de coagulación de la sangre.

Cuando hay una lesión, con la rotura de los vasos sanguíneos, las plaquetas se adhieren a las áreas lesionadas y producen una red de hilos extremadamente delgados que impiden el paso de los glóbulos rojos y retienen la sangre.

Las plaquetas están presentes en cada gota de sangre y su número es de aproximadamente 150.000 a 400.000 plaquetas por milímetro cúbico en condiciones normales de salud.

Plasma

Plasma
El plasma es la parte líquida de la sangre.

El plasma es un líquido amarillo y representa más de la mitad del volumen de sangre.

Consiste en una gran cantidad de agua, más del 90%, donde se disuelven nutrientes (glucosa, lípidos, aminoácidos, proteínas, minerales y vitaminas), oxígeno gaseoso y hormonas, y los desechos producidos por las células, como el dióxido de carbono y otras sustancias que deben eliminarse del organismo.

Tipos de sangre

Los tipos de sangre son sistemas de clasificación sanguínea. Fueron descubiertos a principios del siglo XX por el médico Karl Landsteiner.

Para la especie humana, los tipos de sangre más importantes son el Sistema ABO y el Factor Rh.

En el Sistema ABO, por ejemplo, hay cuatro tipos de sangre: A, B, AB y O.Los posibles tipos de donaciones compatibles son:

  • Escribe un: recibe de A y O y dona a A y AB
  • Tipo B: recibe de B y O y dona a B y AB
  • Tipo AB: recibe de A, B, AB y O y dona a AB
  • Tipo O: recibe de O y dona a A, B, AB y O

Mientras tanto, el factor Rh funciona independientemente del sistema ABO y está relacionado con la producción de un antígeno ubicado en la membrana plasmática de los glóbulos rojos.

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