Era de las revoluciones – Historia

En los primeros 50 años del siglo XIX, se produjeron varias transformaciones en la parte occidental del mundo. La industria y las comunicaciones mostraron un crecimiento significativo. Otro sector que creció fue el militar, en el que la oportunidad de seguir una carrera en el ejército fue un gran atractivo para la juventud de la plebe, influenciada por la filosofía liberal. En ese momento, también hubo un proceso de expansión de la educación primaria pública y un aumento de la población que habitaba las principales ciudades.

Con este advenimiento, las personas que antes vivían en la ciudad comenzaron a tener más acceso a la cultura y a participar más activamente en temas relacionados con la sociedad. Además, este fenómeno gana proporciones mayores con las publicaciones de prensa, que fomentaron la opinión pública. De esta manera, algunos grupos con ideales liberales iniciaron movimientos para impugnar la Santa Alianza, que tenía el objetivo de contener los ideales difundidos por la Revolución Francesa. Poco a poco, los liberales, antes vistos como subversivos, comienzan a ver sus ideas como justificables, respaldando las revoluciones por venir. Desde este punto de vista, el pueblo europeo empieza a ver a las autoridades y a los monarcas que no se sometieron a las leyes, como tiranos.

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Según Eric Hobsbawm, historiador marxista británico, esta primera etapa del siglo XIX se considera la Era de las revoluciones precisamente por la difusión de los ideales de libertad por parte de grupos organizados en Europa. Defendieron temas como los derechos humanos, la igualdad entre los ciudadanos y la soberanía de la población. Influidos por la Revolución Francesa, activistas de carácter nacionalista y liberal incitaban a la revolución permanente. En ese momento, se estaban produciendo movimientos importantes como las guerras por la independencia nacional de las colonias en América Latina, entre otros levantamientos.

Con respecto a los países de Escandinavia, Gran Bretaña y los Países Bajos, hubo feroces disputas dentro de los parlamentos. Sin embargo, en el período que abarca los años 1815 y 1848, se produjeron fuertes conflictos en la Era de las Revoluciones. Desde el inicio de estos enfrentamientos hasta 1829, destacan los movimientos liberales que organizaron levantamientos en la región mediterránea de Rusia. En el año 1825, los “Diciembre” iniciaron una insurrección liberal.

En 1830, las Ordenanzas de julio, llevadas a cabo por Carlos X, disolvieron la recién elegida cámara liberal, censurando la prensa y las nuevas atribuciones del sufragio. De esta manera, estalló una revolución en París y los franceses lograron, tras varios enfrentamientos, hacer abdicar a Carlos X. Así, la alta burguesía, partidaria de la monarquía constitucional, cede el trono a Luis Felipe, conocido como duque de Orleans. Esta revolución en Francia se hizo eco en otros países como Bélgica, que se independizó de los Países Bajos, y otras naciones.

Fuentes:
http://pt.wikipedia.org/wiki/Era_das_Revolu%C3%A7%C3%B5es
http://pt.shvoong.com/books/164016-era-das-revolu%C3%A7%C3%B5es-1789-1848/
http://historica.com.br/book-review/a-era-das-revolucoes
COTRIM, Gilberto. Historia global: Brasil y general. São Paulo: Editora Saraiva, 2005.

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