LA anorexia nerviosa es una perturbación preocupante de carácter alimentario, resultado de una excesiva preocupación por el cuerpo, especialmente por su peso. Así, la persona que se mira al espejo y, a pesar de ser esbelta, ve su imagen distorsionada, como si estuviera muy gordo, empieza a estar inadecuadamente nutrida y a asumir dietas inflexibles.
Este comportamiento lleva a la anoréxica a perder demasiado peso, provocando también problemas psicológicos, físicos y sociales, que pueden alcanzar proporciones muy graves. En ocasiones algunos jóvenes también tienen rastros de bulimia, es decir, en ocasiones comen en exceso, luego se ven afectados por la culpa y expulsan la comida del cuerpo, ya sea por el vómito inducido o por el uso excesivo de laxantes.
Este cuadro ocurre principalmente entre adolescentes y mujeres jóvenes en Occidente, pero los casos también están aumentando entre los hombres. Las causas de la anorexia pueden estar vinculadas al tema de la baja autoestima, a las adversidades enfrentadas en un intento de integración de un grupo social, a la forma en que la persona enfrenta la sexualidad emergente. Todo esto puede agravarse si se da la presencia de un contexto obsesivo-compulsivo, la ocurrencia previa de un acto sexual abusivo o bullying, persecución obsesiva y perversa de los compañeros.
A veces, la anorexia se desarrolla rápidamente y el paciente alcanza la tasa extrema de desnutrición, conocida como caquexia. La mortalidad por este trastorno es la más alta entre los trastornos de naturaleza psíquica, alcanzando entre el 15% y el 20% de los casos. Habitualmente el paciente muere por un infarto, provocado por la falta de potasio o sodio, sustancias que regulan la frecuencia cardíaca.
Algunos de los síntomas más comunes son: el peso corporal desciende excesivamente en poco tiempo, sin otra causa aparente; rechazo a la comida durante las comidas con la familia, siempre con la excusa de que no tienen hambre; obsesión por el índice calórico de los alimentos, algunos consumen solo 200kcal por día; suspensión de la menstruación y retirada de propiedades femeninas; ejercicios físicos excesivos; aparición de depresión, síndrome de pánico y actitudes obsesivo-compulsivas; piel seca cubierta de pelos similares a los de una barba de maíz; reducción de la libido y posibilidad de problemas de erección en los hombres; desarrollo físico lento o incluso suspendido, con estructura esquelética deficiente; descalcificación dental, entre otros.
Pero la anorexia no es una enfermedad letal. Al menos el 70% de las anoréxicas se pueden curar por completo. El paciente debe volver gradualmente a la alimentación normal, ya que el corazón no soportaría un peso al que ya no está acostumbrado. En algunos casos, es necesario hospitalizar al paciente, para que esté bajo la supervisión de nutricionistas.
No existen remedios adecuados para la anorexia, pero algunas sustancias antidepresivas pueden aliviar los síntomas más relacionados con los trastornos mentales. Por lo general, un grupo multidisciplinario se encarga de este tratamiento. También es importante incluir la psicoterapia, que ayudará a la anoréxica en su reintegración social, a adaptarse a su propio estándar de belleza, para que ya no se someta a imposiciones sociales, más insostenibles aún en el caso de modelos y bailarinas, que son más cargada y presionada que las otras chicas.
Fuentes:
http://pt.wikipedia.org/wiki/Bulimia_nervosa
http://pt.wikipedia.org/wiki/Anorexia_nervosa