Jean-Luc Lagarce –

Dramaturgo y director de teatro francés (Héricourt 1957-Paris 1995).

Hijo de trabajadores vinculados a la actividad de las fábricas de Peugeot, Jean-Luc Lagarce interrumpió sus estudios de filosofía y era alumno del conservatorio de Besançon para crear, en 1978, su propia compañía de teatro, la Roulotte. Su puesta en escena de obras de otros autores, como la de El cantante calvo de Ionesco en 1991, a menudo tenían más éxito que las interpretaciones de sus propios textos. Murió de sida a los 38 años, dejando una obra teatral de veintitrés piezas, una voluminosa Periódico, cuentos, ensayos, una película de vídeo y una novela, la despedida, permaneció inédito.

¿Eres estudiante, profesor o academia?

DATE DE ALTA EN NUESTRA RED SOCIAL!, Grupos de estudio, apuntes, escribe en tu propio blog, añadir tu academia o dar clases particulares y Aprende!!!.

Abrir un perfil

Si exceptuamos su Reglas de buenos modales en la sociedad moderna (1993), que irónicamente adapta un tratado sobre las buenas costumbres burguesas, su teatro se puede dividir en dos secciones. El primero, de inspiración autobiográfica, escenifica de manera transpuesta, en diferentes tonalidades que van desde la fantasía satírica hasta el humor más doloroso, la relación de un personaje, que es su doble, con su familia y sus orígenes provincianos. Dentro Regreso a la ciudadela (1984), Solo el fin del mundo (1990), Estaba en mi casa y estaba esperando que viniera la lluvia (1994) y la tierra lejana (1995), este personaje, visible o invisible, regresa o es esperado en su familia después de una larga ausencia, revelando con su regreso las diferencias irreductibles que lo oponen a su entorno. El segundo es una serie de cuadros de la vida provincial, de los pequeños teatros irrisorios donde actúan comparsas itinerantes (Salón de música, 1989) hasta que el reencuentro de amigos y familiares cambió por cuestiones de tiempo y dinero (Último remordimiento antes del olvido, 1987). Además, sus textos íntimos reflejan su lucha artística, su homosexualidad y su enfermedad.

El estilo de Jean-Luc Lagarce alterna entre diálogos reales y monólogos entrecruzados, manteniendo la emoción a distancia para expresar mejor el sufrimiento y la necesidad de amor en una escritura seca y suspendida. La inscripción de Solo el fin del mundo en el repertorio de la Comédie-Française, en 2007, es uno de los signos del éxito póstumo de esta obra moderna por su artesanía (la acción suele ser estática o inmóvil) y por la organización musical de sus líneas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *