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Saxofonista de jazz estadounidense (Hamlet 1926-Huntington 1967).
Jugando un papel decisivo en el nacimiento del free jazz, John Coltrane trastocó las reglas de la improvisación tan profundamente como lo hicieron Louis Armstrong o Charlie Parker en su época. Es uno de aquellos cuya influencia ha alcanzado la dimensión de un verdadero culto.
Un curso de capacitación
Nacido en un ambiente modesto, donde la música tiene un gran lugar, John Coltrane lo descubre él mismo asistiendo a la iglesia metodista de la que su abuelo materno es reverendo. Aprendió a tocar el clarinete, luego el saxofón alto, y en 1943 completó su formación musical en Filadelfia. Fue en esta ciudad, a su regreso del servicio militar en 1945, donde debutó en orquestas de rhythm and blues. Luego cruzó dos etapas decisivas en su carrera como saxofonista, tocando junto a Dizzy Gillespie (1949-1951) y Miles Davis (1955-1957), gracias a lo cual realmente salió del anonimato.
Coltrane (más conocido como Trane) todavía trabaja en Nueva York con Thelonious Monk, adquiriendo su estilo de interpretación específico (las «capas de sonido») como lo demuestra el álbum. Tren azul (1957), antes de regresar por dos años con Miles Davis. Indiferente a la opinión de este último, que le reprocha su falta de concisión, desarrolla solos siempre que sean concepciones impetuosas y armónicas que no sean ajenas a su interés por el arpa. A los 33, su genio se revela en toda su singularidad con Pasos gigantes, luego con Mis cosas favoritas. Sin duda, para «ir más allá» estéticamente del bebop, era necesario llegar a esos límites de virtuosismo que Charlie Parker parecía hacer intransitables.
Una herencia grandiosa
Fue en 1960 que Coltrane fundó su propio cuarteto, que, tras varios cambios, encontró su estabilidad con McCoy Tyner (piano), Jimmy Garrison (contrabajo) y Elvin Jones (batería). Asimilando toda la influencia de Ornette Coleman, convierte a su grupo en un laboratorio de improvisación colectiva practicada con un lirismo y sutileza inigualables. Eric Dolphy, que impone el clarinete bajo y la flauta en el free-jazz, lo acompañará en unas sesiones históricas. Después del saxofón tenor, donde explotan nuevos sonidos, Coltrane adoptó la soprano y se convirtió en el principal diseñador de este formidable instrumento. Su imaginación melódica se multiplica por diez por un conocimiento de modos absolutamente inédito en la tradición occidental: si es cierto que es bajo la influencia de Miles Davis que ha generalizado su uso, su educación musical tiene mucho que ver – estudió la politonalidad, así como su creciente interés por las ragas indias y la música africana. Habiéndose convertido además para él en la prueba de un anclaje demasiado sistemático a las reglas armónicas de Occidente, disolverá su cuarteto al cabo de cinco años.
Sin duda, sintiendo que sus días están contados para él, Coltrane se embarca en una carrera desesperada, cuyo único objetivo parece ser dejar el máximo de huellas de su investigación. Prácticamente toca día y noche y graba mucho: sus pistas … Impulso espiritual (1963), Creciente (1964), Un amor supremo (identificación.), Transición, Ascensión, Nave Solar, Om, Meditaciones (todos de 1965) – reflejan una aspiración mística que es, además, la apuesta de esta época en que floreció el movimiento hippie y donde, en un registro muy similar, comenzó a aparecer Jimi Hendrix. Con tres años de diferencia, estos dos gigantes del blues desaparecerán prematuramente, como Charlie Parker y algunos otros antes que ellos. Coltrane sucumbe al cáncer de hígado. Su muerte se siente como una tragedia hasta tal punto que el jazz contemporáneo se calificará en lo sucesivo de «poscoltraniano».
Regresar a Dios
Grabado por primera vez el 9 de diciembre de 1964, Un amor supremo es sin duda la obra más importante de toda la carrera artística de John Coltrane. «Búsqueda lírica y mística», para usar las palabras del musicólogo Lucien Malson, debe ser vista ante todo como una ofrenda de Coltrane hecha a Dios, que lo había ayudado a liberarse del alcohol y las drogas, y como símbolo par excelencia de su conversión. Desde un punto de vista estrictamente musical, esta vez, Un amor supremo marcó una nueva etapa en la investigación teórica emprendida por el saxofonista, la del jazz politonal.