Paquete de cordones nerviosos ubicados en la parte inferior de la columna vertebral. (PNA cauda equina ..)
Estructura
La cola de caballo está formada por las raíces de los nervios de la médula espinal que se encuentran al nivel de las últimas tres vértebras lumbares, las vértebras sacras y las vértebras coccígeas. Estas raíces son aproximadamente verticales; rodean el extremo inferior de la médula y luego se extienden hacia el canal espinal lumbar antes de separarse para salir de la columna entre las vértebras. Luego dan lugar a los nervios de la pelvis y las extremidades inferiores.
Patología
La compresión en esta área causa lo que se llama síndrome de cola de caballo. Esto suele ser el resultado de una hernia de disco ubicada entre dos vértebras lumbares, a veces un tumor nervioso como un ependimoma (tumor desarrollado a expensas de las células del ependyma, un canal estrecho en el centro de la médula espinal que se extiende a las cámaras ventriculares del cerebro que contiene líquido cefalorraquídeo) o neuroma (tumor que crece a expensas de un nervio) o estrechamiento del canal espinal lumbar debido a la osteoartritis. Esta compresión provoca la denominada paraplejía periférica, o flácida, que se caracteriza por una disminución del tono muscular de las extremidades inferiores, atrofia de los músculos y una abolición de los reflejos. El paciente sufre de dolor que se irradia a la región lumbar, a la altura del perineo y miembros inferiores, así como de insensibilidad de la piel del perineo, los genitales y la parte superior de los muslos. También existen signos genitales (impotencia) y esfínter (pérdida de la necesidad de orinar, incontinencia o, por el contrario, retención de orina). El diagnóstico se realiza después de una punción lumbar (punción del líquido cefalorraquídeo con una aguja insertada en el fondo de saco meníngeo en la región lumbar), por tomografía computarizada o por resonancia magnética (MRI), a veces por mielografía (examen radiológico de la médula espinal utilizando un medio de contraste). El síndrome de la cola de caballo puede volverse irreversible rápidamente, a veces en cuestión de horas. Por lo tanto, debe tratarse de manera urgente mediante una intervención neuroquirúrgica de descompresión (extirpación de una hernia de disco o un tumor, etc.).