Written by La psicología define la Inteligencia emocional como el poder de identificar tus emociones y las de los demás, así como el don de trabajar cada una de ellas. El sujeto emocionalmente inteligente es capaz de animarse y avanzar incluso ante las decepciones; tiene la capacidad de contener estímulos, transferir sentimientos a contextos apropiados; ejercite una gratitud extendida; animar a los demás, induciéndolos a despertar en ellos las mayores propensiones y a participar en los esfuerzos colectivos.
Foto: ImageFlow / Shutterstock.com
Algunos académicos, como Daniel Goleman, dividen la inteligencia emocional en cinco tendencias. Cuando alguien distingue una emoción tal como se manifiesta, se dice que tiene la capacidad de autoconocimiento emocional. La persona que tiene Control Emocional, en cambio, tiene el don de lidiar con sus sentimientos, adaptándolos a cada escenario específico.
En cuanto a la Auto-Motivación, el individuo dirige sus afectos hacia un propósito fundamental, y así puede continuar en la lucha por lograr ese objetivo. También están aquellos que son expertos en identificar los sentimientos de los demás y aquellos que son expertos en las relaciones entre personas.
Los tres primeros factores están vinculados a la Inteligencia Intrapersonal, la capacidad de entenderse a uno mismo, de producir una representación auténtica y veraz de uno mismo y de utilizarla de forma permanente y creativa. Los dos restantes están vinculados a la Inteligencia Interpersonal, el don de comprender a los demás, qué elementos los estimulan, cómo actúan y cómo actuar asociativamente con ellos.
Charles Darwin fue quizás el primer teórico en utilizar una concepción similar de la inteligencia emocional. Defiende el valor de expresar emociones para la subsistencia y acomodación a un contexto dado. Aunque algunos académicos enfatizan los elementos del conocimiento en la composición de la inteligencia, varios otros académicos famosos están comenzando a enfatizar la importancia de los factores no cognitivos.
El psicometrista de la Universidad de Columbia, Robert L. Thorndike, utilizó el término «inteligencia emocional» en 1920 para referirse a la capacidad de comprender y animar a los demás. Veinte años después, David Wechsler abordó el predominio de los aspectos no intelectuales sobre el desempeño de la inteligencia. También afirmó que los estándares de inteligencia solo estarían completos cuando estos elementos se consideraran adecuadamente en el análisis de este concepto.
Fue solo en 1983 que el psicólogo Howard Gardner desarrolló su tesis de Inteligencias Múltiples. En este estudio insertó el propósito de cubrir tanto las concepciones de inteligencia intrapersonal como las de inteligencia interpersonal. Según este estudioso, herramientas como el coeficiente intelectual no dilucidan por completo el potencial para adquirir conocimientos.
Fuentes:
http://pt.wikipedia.org/wiki/Intelig%C3%AAncia_emocional
http://pt.wikipedia.org/wiki/Howard_Gardner
http://www.din.uem.br/ia/emocional/
