Written by Japón ha cultivado la técnica del paisajismo desde la antigüedad, probablemente mucho antes del siglo VI. Los japoneses ven esta práctica como una de las modalidades artísticas más sublimes, ya que representa la esfera muy íntima de la naturaleza en un espacio restringido, de tal manera que es posible establecer una perfecta armonía con el entorno.
Jardín japonés. Foto: nui7711 / Shutterstock.com
Así jardín japonés es el resultado de este arte, una tradición apreciada en los hogares, en las proximidades de los parques, en los recintos budistas o sintoístas y en sitios históricos como los antiguos castillos de Japón. los Jardines Zen, que se encuentran tanto en este país como en Occidente.
Ciertamente, los jardines japoneses caracterizan al Japón feudal, al igual que la antigua y venerada ceremonia del té. Además, conducen de forma natural a sus visitantes a un estado de meditación, calma y espiritualidad. En este contexto, prevalecen los factores filosóficos, espirituales y simbólicos, valores que transmite el agua, las piedras allí presentes, las herramientas de jardinería y toda la flora que en ella se disemina.
Algunos estudiosos aseguran que fueron importados de China, ya que de allí se originan los prototipos de los jardines más antiguos, completamente enfocados en la idea de transmitir ocio y entretenimiento a los nobles. Los pertenecientes a la Era Heian, que duró desde 794 hasta 1185, presentaban constantemente la presencia de un lago rodeado por una isla.
Fueron construidos con el objetivo de observar la naturaleza y sus incesantes cambios de estación. A partir de ese momento, los jardines comenzaron a conquistar distintas peculiaridades, con preponderancia de las distintas disposiciones de las piedras. Se puede decir que algunas características son fundamentales para la caracterización de un jardín japonés.
El elemento más conocido es el Sakura o cerezo decorativo, también llamado flor de la Felicidad; juega un papel fundamental en la cultura japonesa, entre marzo y abril los japoneses celebran el Hanami, fecha en la que se celebra la floración de este arbusto, evento que atrae a muchos turistas.
El Momiji-Gari o Red Acer traduce la típica melancolía de los japoneses. La cara mística del jardín viene dada por la presencia de faroles de piedra, que contribuyen a una mejor concentración e ilumina la psique; a través de estas luces se despiertan los valores tradicionales y espirituales.
El elemento agua está representado por el lago y la carpa, que tienen un significado esencial, ya que esta sustancia es vital para la existencia. Los animales, a su vez, simbolizan la fertilidad y el progreso. Taiko Bashi o el puente es un camino que serpentea por el jardín, significando el ascenso a una etapa espiritual y emocional superior, que implica crecimiento y conocimiento interior; el bambú plegable revela el don humano de amoldarse a cualquier situación y de transformarse.
Las piedras de las cascadas son el núcleo central del jardín. La roca colocada verticalmente simboliza la paternidad; y el insertado horizontalmente representa la maternidad, de la que emana el agua. Los otros son el retrato de los descendientes. Los bambúes tienen sus ramas atadas, de modo que el arbusto se inclina sobre el lago, como si le rindiera homenaje.
Fuentes:
http://pt.wikipedia.org/wiki/Jardim_japonês
http://www.jardineiro.net/br/artigos/jardim_japones.php
