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El significado de la palabra filosofía, del griego philo (que significa «amor») y sophia («conocimiento») ya da una pista para la respuesta a la pregunta sobre su utilidad.
Impulsados por este “amor al conocimiento”, los primeros filósofos buscaron romper con el sentido común y la conciencia mítica. La filosofía nació con el objetivo de desarrollar una conciencia crítica del mundo, encontrando respuestas que ya no se basen en la fe y la autoridad.
Desde entonces, la filosofía se ha convertido en un área de conocimiento que tiene como objetivo cuestionar todos y cada uno de los aspectos del mundo, la vida o lo que sea relevante para las personas. Para ello, se dan respuestas lógicas y racionales a las preguntas.
La pregunta «¿Para qué sirve la filosofía?» trae consigo reflexión, espíritu cuestionador y actitud crítica y filosófica. La filosofía representa el escape de la ignorancia y la búsqueda del conocimiento de uno mismo y del mundo a través del pensamiento crítico.
1. La filosofía crea conceptos y fundamentos para otros conocimientos.
La filosofía se ocupa de la construcción de conceptos que servirán de base para varias áreas del conocimiento. Así, es tarea de la filosofía crear y desarrollar conceptos, siendo un campo de conocimiento que tiene como objetivo producir conocimiento.
Por esta característica, se dice que la filosofía es una actividad autotélica. En otras palabras, el telos (objetivo) de la filosofía es en sí mismo (yo).
Al tratarse de un área de conocimiento autotélico, la filosofía acaba siendo objeto de prejuicios. Puede y debe abordar todos los temas que puedan ser relevantes para la humanidad en general, y producir tanto conocimiento como sea posible sobre estos temas.
De esta manera, rompe con la idea prejuiciada de que es inútil, se presenta como la raíz de todo el conocimiento ya producido y tiende a anticipar los próximos temas a desarrollar.
Por ejemplo, la ciencia, un área del conocimiento que tiene un papel privilegiado en el mundo contemporáneo, solo se pudo desarrollar a partir de las bases metodológicas creadas por la filosofía.
Ver más en: que es la filosofia?
2. La filosofía ayuda a reflexionar sobre la vida
La filosofía tiene una fuerte conexión con la vida cotidiana de las personas y provoca una reflexión crítica que crea un distanciamiento de todo lo común y trivial. Esta distancia es importante para que la vida no se convierta en una práctica automática y se puedan tomar decisiones conscientes sobre las acciones.
El ritmo cada vez más acelerado de la vida contemporánea tiene un efecto perjudicial sobre la libertad de las personas. Sin una reflexión adecuada sobre la vida, las personas tienden a alienarse y no se dan cuenta de cuáles son sus necesidades reales.
El lema «conócete a ti mismo» que se encuentra en el templo del dios Apolo, en la antigua Grecia es uno de los motores de la filosofía desde su nacimiento y atento a la necesidad de la reflexión y el autoconocimiento.
De lo contrario, una vida irreflexiva genera el vaciamiento del sentido de su propia existencia, que, en general, se convierte en fuente de frustraciones e infelicidad.
Este vacío existencial acompañado de frustraciones suele ser llenado por el consumismo. Según los filósofos de la Escuela de Frankfurt, esto conduce al proceso de fetichismo de la mercancía y cosificación de los individuos.
El fetichismo de la mercancía se da cuando los productos adquieren características humanas que se prestan a los individuos. Mientras las personas experimentan la cosificación, se convierten en cosas, un producto deshumanizado que comienza a identificarse a través de lo que consumen.
Ver más en: Conocete a ti mismo.
3. La filosofía es la base de la ética y la política.
Fue el filósofo griego Aristóteles, quien definió a los seres humanos como animales sociales. Así, la vida en sociedad presenta interrogantes sobre la vida cotidiana y la relación entre las personas.
Sobre estas relaciones interpersonales y la definición del bien común que desarrolla la ética. La ética sirve para definir los principios que sustentan la vida en sociedad, sin ella sería difícil entender qué es el bien, la justicia, las virtudes y demás principios que guían las acciones.
Asimismo, la filosofía sirve para desarrollar el conocimiento sobre el estado, las mejores formas de gobierno y la participación de los individuos en estos procesos sociales.
Pensar en las mejores formas de vida y construir una sociedad justa para sus ciudadanos ha sido una preocupación de la filosofía desde la antigua Grecia.
El desarrollo del concepto de democracia, fundamento de las formas contemporáneas de gobierno, se basa en la filosofía, así como en las diferentes ideologías adoptadas por los Estados.
A su vez, los avances científicos y tecnológicos y su influencia en la vida de las personas son objeto de una intensa investigación bioética.
La bioética busca sentar las bases de estos avances para que las personas no resulten perjudicadas y se les garantice el respeto a la vida humana y su desarrollo sostenible en el mundo.
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