Resublimación – Física –

Resublimación es el proceso opuesto a la sublimación, es decir, es el paso directo de un material del estado gaseoso al sólido. También se puede llamar sublimación inversa o deposición (ya que las moléculas de gas se pueden depositar espontáneamente para formar un sólido), pero aún así, muchos químicos se refieren a ambos procesos como simplemente sublimación.

En condiciones normales de temperatura y presión, normalmente vemos sustancias pasar de un estado gaseoso a un líquido y luego a un sólido, sin embargo, es posible que un gas, bajo ciertas condiciones específicas, «salte» la fase líquida y solidifique directamente . Este fenómeno se puede explicar mejor observando el gráfico siguiente, que describe, para una sustancia determinada, las transiciones de estado físico que se producen en función de las variaciones de temperatura y presión.

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El punto donde se encuentran los estados sólido, líquido y gaseoso se llama «punto triple», donde la materia está en equilibrio en los tres estados. Cada material del universo tiene sus propios valores de presión y temperatura correspondientes a cada fase, por lo que este gráfico puede cambiar mucho según sus propiedades físicas.

Cuando la presión a la que se somete un gas es menor o igual a la presión de vapor de su punto triple, y la temperatura disminuye, se produce la resublimación. Asimismo, el mismo efecto ocurre cuando un gas se encuentra a temperaturas por debajo de su punto triple y la presión aumenta.

Muchas sustancias tienen una presión de vapor mucho más baja que la presión atmosférica y es por eso que no estamos acostumbrados a ver resublimaciones en nuestra vida diaria. Aun así, es posible citar algunos ejemplos de este fenómeno en condiciones cercanas a la temperatura y presión normales.

En los países fríos es posible ver que el vapor en el aire se convierte directamente en hielo en las hojas, en el suelo o en la superficie de los automóviles sin convertirse primero en líquido (escarcha). Lo mismo ocurre con la formación de nubes de nieve. Esto se debe a que, a temperaturas tan bajas, las partículas de vapor pierden mucha energía e incluso si se encuentran en un estado de gran agitación de partículas, cuando entran en contacto con una superficie muy por debajo del punto de congelación del agua, se convierten directamente en hielo.

En las chimeneas, muchas partículas se elevan en forma de gas, por lo que al entrar en contacto con las paredes, pierden energía muy rápidamente y se enfrían convirtiéndose en sólidos. Esta resublimación se utiliza industrialmente para evitar la contaminación atmosférica después de la combustión, ya que algunos componentes gaseosos se depositan antes de ser liberados a la atmósfera.

Otra aplicación industrial de la resublimación es la fabricación de películas delgadas de carbono, utilizadas en componentes informáticos. En este proceso, un material sólido se calienta al nivel de un estado gaseoso dentro de una cámara de baja presión. Las moléculas de este gas luego viajan a través del espacio en la cámara y se vuelven a sublimar en una superficie objetivo hasta que crean películas delgadas.

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