Enfermedad inflamatoria causada por la acción de toxinas del estreptococo del grupo A, que provocan inflamación de las grandes articulaciones y del corazón.
La fiebre reumática (AAR) se observa en niños mayores de 4 años y en adolescentes. Siempre ocurre después de la faringitis estreptocócica del grupo A, no se trata con antibióticos y todavía es común en algunos países en desarrollo. Casi ha desaparecido en los países industrializados. La virulencia del germen no es responsable de las lesiones que ocurren durante la enfermedad; incriminamos un proceso autoinmune.
Signos y síntomas
La fiebre reumática ocurre de 2 a 3 semanas después del inicio de la angina, que con mayor frecuencia no se diagnostica y, por lo tanto, no se trata. Produce poliartritis (reumatismo que afecta a varias articulaciones) y fiebre alta. Las grandes articulaciones (rodillas, codos) se ven afectadas; están calientes, dolorosas y aumentan de tamaño. El daño cardíaco puede ocurrir durante la primera semana. Toma la forma de inflamación del pericardio, miocardio o endocardio (válvulas). Ella es detectada por ultrasonido. Esto puede conducir a la formación de tejido cicatricial, responsable a largo plazo del estrechamiento o insuficiencia valvular, mitral o, más raramente, aórtico. Es la gravedad esencial de la AAR la responsable de la mayoría de las enfermedades de las válvulas cardíacas.
Diagnóstico, tratamiento y prevención
Una infección reciente por estreptococo se evidencia al analizar la sangre para detectar ciertos anticuerpos (antiestreptolisinas [ASLO]). El tratamiento consiste en una terapia prolongada con antibióticos y corticosteroides. La prevención de la recurrencia se basa en la administración de antibióticos por vía oral todos los días o por vía intramuscular a intervalos regulares durante al menos 5 años.
El riesgo de RAA justifica el tratamiento de cualquier faringitis estreptocócica del grupo A con un antibiótico apropiado. Los médicos generales y los pediatras pueden utilizar pruebas de diagnóstico rápido para estos estreptococos (PDR) para identificar la faringitis estreptocócica y las indicaciones específicas de los antibióticos. Su prescripción solo está justificada si la prueba TDR es positiva.