LA síndrome del cascanueces, o síndrome del cascanueces, fue descrita por primera vez en 1950 por Chait y Schepper y se refiere al cuadro clínico provocado por la compresión de la vena renal izquierda en el ángulo que forma la aorta y la emergencia de la arteria mesentérica superior.
La incidencia y fisiopatología de este síndrome no se conoce con certeza, pero se sabe que es causado por la compresión de la vena renal, lo que lleva a un aumento de la presión en el sistema venoso renal, con el consiguiente desarrollo de la circulación colateral y la aparición de varices. venas
Aunque algunos pacientes se encuentran asintomáticos, la mayoría presenta hematuria macroscópica, proteinuria ortostática, lumbalgia o dolor en el flanco izquierdo, varices periuréticas o gonadales. Con poca frecuencia, puede experimentar síntomas de congestión pélvica, como dismenorrea, dispareunia, dolor pélvico y disuria, así como la aparición de varicocele y várices vulvares, pélvicas o glúteas, especialmente durante la fase pospuberal. Los síntomas pueden agravarse con la actividad física.
El diagnóstico se realiza mediante pruebas de laboratorio y por imágenes. Los análisis de orina indican la presencia de glóbulos rojos isomorfos, mientras que la venografía retrógrada combinada con la medición del gradiente de presión en la vena cava inferior y renal izquierda es el examen de elección para la evidencia de hipertensión venosa renal. Además, la tomografía computarizada helicoidal y la resonancia magnética también pueden indicar compresión de la vena renal izquierda. La ecografía Doppler color también es otra opción para el diagnóstico de este trastorno.
El tratamiento varía según cada caso, pudiendo ser conservador, quirúrgico, químico o endovascular con stent siendo esta última opción la menos invasiva y eficaz.
Fuentes:
http://www.actamedicaportuguesa.com/pdf/2011-24/suplemento-3/695-698.pdf
http://www.spr.org.br/files/public/magazine/public_103/121-124.pdf
http://files.bvs.br/upload/S/1679-1010/2010/v8n3/a015.pdf